“Consideramos que es un acto de terrorismo contra mexicanos, efectuado en territorio de Estados Unidos”, sentencio el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, hace dos años, luego de que un hombre blanco asesinara a 23 personas en un tiroteo dirigido contra la comunidad hispana de El Paso, Texas.
Ahora, a dos años del ataque, Marcelo Ebrard anunció a través de su cuenta de Twitter que se reunirá con los familiares de las víctimas que fallecieron el 3 de agosto del 2019 y durante los días siguientes. Según diversos conteos, de las 23 víctimas, 9 eran mexicanos y mexicanas. Sin embargo, en una entidad tan fuertemente marcada por la migración como lo es Texas, incluso entre las víctimas con nacionalidad estadounidense es muy probable encontrar raíces mexicanas o de otras partes de latinoamérica.
“Estaré hoy en El Paso con los familiares de las víctimas de aquel acto brutal acaecido el 3 de agosto de 2019, en el que perdieron la vida 23 personas [...] Ahora como entonces, México condena la violencia, el racismo y el odio que sólo conducen a la tragedia”, fueron las palabras con las que el canciller anunció su viaje hacia los Estados Unidos (EE.UU.).
El tiroteo de El Paso ocurrió aproximadamente a las 10:40 de la mañana, al interior de un Walmart en el centro comercial Cielo Vista. Ese día, el presunto asesino, Patrick Wood Crusius, ingresó al establecimiento cargando un rifle WASR-10 (que según las autoridades estadounidenses compró de manera legal). Se trata de una versión de la AK-47 que se diseñó para su uso por civiles.
Uno de los gerentes de la tienda fue el que lanzó la alerta de “Código Café”, designada para tiroteos activos, luego de ver a Crusius abrir fuego en el estacionamiento, antes de entrar al establecimiento. Inmediatamente, los empleados de la tienda comenzaron a asistir a los clientes para esconderse y evacuar el lugar. Los primeros elementos de seguridad llegaron a seis minutos de la primera llamada al teléfono de emergencia 911, sin embargo, para ese momento el tirador ya había disparado contra sus víctimas.
De las 23 personas asesinadas, 9 eran mexicanas, 13 estadounidenses y una era proveniente de Alemania. Entre los 23 heridos, 17 eran de los EE.UU. y 6 de México.
Una de las pruebas que reforzó la hipótesis de que este se trataba de un ataque en contra de la comunidad mexicana viviendo en los EE.UU. es un manifiesto, supuestamente escrito y publicado por Crusius en el portal 8chan. El jefe de policía de El Paso, Greg Allen, declaró que se encontraban “razonablemente seguros” de que un texto publicado bajo el título de “La verdad inconveniente” (The Inconvenient Truth) era obra del principal sospechoso.
En este texto, Patrick Wood Crusius supuestamente hace referencia a una teoría de conspiración popular entre los grupos de supremacistas blancos y neonazis, según la cual existe una complicidad entre grupos de élites que pretenden reemplazar a la población blanca con gente no-blanca. La teoría de “El Gran Reemplazo” (The Great Replacement) se atribuye normalmente al francés Renaud Camus, y ha sido citada en diversos actos de odio, discriminación y antisemitismo.
El manifiesto presuntamente escrito por Crusius también hace referencia al tiroteo en las mezquitas de Christchurch, Nueva Zelanda, que ocurrió el 15 de marzo de ese mismo año. Se trató de un ataque contra la comunidad islámica donde fueron asesinadas 51 personas y otras 40 quedaron heridas.
En esa ocasión, el asesino también publicó un manifiesto en 8chan. Este portal se caracterizaba por tener una leve o nula intervención por parte de los administradores en el contenido que se publicaba ahí. Por esta razón, no sólo fueron atraídas personas que abogan por la libertad en el internet, sino grupos de supremacistas blancos, neonazis, alt-right y antisemitas, entre otros, que encontraron en 8chan una oportunidad para desahogar y compartir sus discursos de odio.
8chan fue cerrada en Agosto del 2019, tras el tiroteo de El Paso, sin embargo, en noviembre de ese mismo año fue relanzada bajo el nombre de 8kun.
El año pasado, el juicio en contra de Patrick Wood Crusius fue retrasado debido a la pandemia de COVID-19. En contra del acusado hay 22 cargos por cometer crímenes de odio que resultaron en la muerte, 22 cargos por uso de armas de fuego para cometer asesinatos, 23 cargos por cometer crímenes de odio que involucran intento de asesinato y 23 cargos por uso de armas de fuego durante un crímen. A esto se agregan los cargos a nivel estatal. Por todo esto, la parte acusatoria busca pena de muerte en contra de Wood Crusius, aunque su defensa responde que es probable que el caso en su contra permanezca abierto por algunos años más.
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