La Primera Comisión de Gobernación, Puntos Constitucionales y Justicia de la Comisión Permanente dio luz verde este jueves 29 de julio al periodo extraordinario legislativo solicitado por Ricardo Monreal, en el cual se ratificará al nuevo titular de la Secretaría de Hacienda y se afinaran detalles de la reforma a la Ley Laboral en materia de subcontratación, también conocido como outsourcing.
Esto quiere decir que será hasta que inicie la siguiente legislatura, el 1 de septiembre de este año, cuando se defina si se les retirará el fuero a los diputados federales Saúl Huerta y Mauricio Toledo, señalados de pederastia y enriquecimiento ilícito, respectivamente.
A pesar de que el senador Damián Zepeda Vidales, del Partido Acción Nacional (PAN), insistió en que se incluyera el tópico de los desafueros a los legisladores en el dictamen para el periodo adicional, Ana Lilia Rivera, presidenta de la comisión solicitó que se votara éste tal cual estaba, con lo que se obtuvo una votación de 12 a favor, uno en contra y una abstención.
“Me queda claro que no va a pasar, pero quiero visibilizarlo. No quiero estorbar, está bien lo que están pidieron los compañeros de quitar eso, está bien, nada más estoy visibilizando el tema. Nada más que quede claro que no permitieron la propuesta”, dijo el panista.
El responsable de que el tema de los desafueros no se incluyera en el dictamen fue Raúl Eduardo Bonifaz Moedano, secretario de la Comisión Permanente, quien solicitó en una reserva que este tópico no fuera incluido en el extraordinario.
Y es que Benjamín Saúl Huerta Corona está acusado de abuso sexual y violación contra cuatro menores de edad, motivo por el cual fue expulsado de Movimiento Regeneración Nacional (Morena), pero como eso no tiene que ver con su cargo de representación popular, continúa teniendo fuero como diputado.
De acuerdo con el testimonio de una de las presuntas víctimas, el legislador le había ofrecido un puesto de trabajo en su equipo y porque le prometió que le ayudaría a costear sus estudios universitarios. Además, declaró que el día de los hechos, el diputado le dio una bebida que le hizo sentirse mal, y aprovechando esa situación lo llevó a un hotel en la Zona Rosa donde consumó el abuso.
Por su cuenta, Mauricio Alonso Toledo Gutiérrez es investigado por la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ-CDMX) por su supuesta responsabilidad en el delito de enriquecimiento ilícito, esto porque el ex delegado de Coyoacán y actual diputado por el Partido del Trabajo (PT) tiene ingresos que no están justificados de acuerdo a sus percepciones.
La Fiscalía capitalina advierte que el legislador compró en 2019 dos departamentos en “distinguidos conjuntos habitacionales” el mismo día y a la misma persona, lo que corresponde a un incremento patrimonial cuestionable.
Además, se menciona que en cuanto al valor de uno de los inmuebles adquiridos en la alcaldía Tlalpan, entre la Fiscalía y la defensa, existe una discrepancia superior a los 10.5 millones de pesos.
Esto ya se veía venir, pues Xóchitl Gálvez, difundió en redes sociales el intento de los morenistas por aplazar el desafuero de los legisladores.
“Basta de doble discurso. Morena dice que quiere el desafuero de Mauricio Toledo y Saúl Huerta. Aquí hay una evidencia donde el día de ayer, que estaba discutiendo el tema, el diputado Raúl Bonifaz, vicepresidente por Morena en la mesa directiva, pidió, en una reserva, se sacara el tema”, condenó en su cuenta oficial de Twitter la noche del miércoles 28.
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