“USD 1 millón para el que aporte datos exactos del paradero del Maguey”. El mensaje lanzado por los autodefensas y miembros de Cárteles Unidos en los últimos días es claro: una recompensa millonaria a cambio de quien pueda identificar a Santiago Quintero Magallón, jefe de plaza del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) del municipio de Buenavista, en Michoacán.
La cacería contra el supuesto narco comenzó el pasado domingo 11 de julio, alrededor 17:00 horas. Miguel Ángel Gutiérrez Aguilar, el Kiro, líder de los autodefensas de Tepalcatepec, advirtió a sus familiares que lo estaban siguiendo. La situación desesperante — pues el Kiro viajaba con su esposa y sus hijos— terminó con el secuestro deL autodefensa y su familia. Gutiérrez Aguilar había sido levantado por el Maguey.
Este hombre, lugarteniente del cártel de las cuatro letras, pretendía emboscar —sin misericordia alguna— a todos aquellos autodefensas que intentaran defender al Kiro. Lo que no contaba es que los justicieros llegarían armados hasta los dientes y en un convoy de 30 camionetas.
El municipio quedó hecho pedazos, pero pudieron rescatar al líder de las autodefensas. Desde aquel día, los civiles armados, y los criminales de Cárteles Unidos y Los Viagras “peinaron” el municipio de Buenavista donde, según les avisaron, está oculto el Maguey. Necesitan capturarlo para que no vuelva a tomar fuerza en la región.
Mientras sucede una u otra cosa, el Cártel Jalisco Nueva Generación ya entró a los municipios de Uruapan y Zamora e intentan avanzar entre los montes rumbo a Buenavista para recuperar el territorio.
Los autodefensas aseguran que su intención no es asesinar personas, por lo que han dejado en libertad a los sicarios del CJNG que habían retenido.
La situación se ha mantenido tensa desde entonces. El martes 20 de julio, la policía comunitaria de Tepalcatepec informó sobre el quinto ataque en lo que va de la semana. “Todos a sus puestos”, señaló.
Las autoridades estatales aseguran que los últimos episodios de violencia en Michoacán son parte de la macabra estrategia conocida como “calentar la plaza”. Según la Secretaría de Seguridad Pública de Michoacán, un comando del grupo criminal Cárteles Unidos —un conglomerado de células delictivas de Michoacán como Los Viagras, los Caballeros Templarios, Los Blancos de Troya y los Botos— se desplegó en el municipio de Buenavista, donde el CJNG mantiene sus bases de operaciones.
Como respuesta, el cártel de las cuatro letras atacó las oficinas del poblado de Tarecuato, así como negocios, provocando la muerte de un poblador.
El ambiente de violencia tiene lugar luego de las elecciones en México del pasado de 6 junio, que desde hace varios ciclos se han visto empañadas por oleadas de asesinatos.
Muchas de las víctimas mortales han caído en desgracia a manos de las organizaciones criminales, que buscan acuerdos con los políticos para conseguir protección y expandir sus tentáculos. De acuerdo con los expertos, los conflictos tienden a empeorar cuando los grupos rivales llegan a acuerdos con distintas agencias o instituciones estatales.
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