En las últimas semanas la violencia e inseguridad han convertido a Tamaulipas en un auténtico infierno. Los enfrentamientos entre cárteles del narcotráfico han dado paso a masacres a civiles inocentes, así como desapariciones y asaltos en las carreteras del Estado.
Este baño de sangre y terror que viven los tamaulipecos es provocado por una “reorganización de la delincuencia organizada”, de acuerdo con fuentes de seguridad en Texas y miembros del Grupo de Operaciones Especiales (Gopes), consultados por la revista Proceso.
Y es que criminales locales intentan frenar la entrada del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), grupo liderado por Nemesio Oseguera Cervantes “El Mencho”, a la entidad. Así lo señaló el periodista Juan Alberto Cedillo en la nueva publicación del semanario.
“Existe una guerra soterrada en Nuevo Laredo, ya que el líder del Cártel del Noreste, Juan Gerardo Treviño Chávez, ‘El Huevo’, se alió recientemente con Fausto Isidro Meza Flores, ‘El Chapo Isidro’, actual jefe del Cártel de los Hermanos Beltrán Leyva, para frenar el ingreso del Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) en Tamaulipas”
Cedillo detalló que presuntamente fueron elementos de La Tropa del Infierno, brazo armado del Cártel del Noreste (CDN), los que asesinaron sin piedad a 15 ciudadanos en la ciudad de Reynosa el pasado 19 de junio.
Sin embargo, las fuentes de seguridad indicaron que la peor parte de esta violencia aún no ha llegado, pues al respecto “el CJNG está penetrando en alianza con la fracción del Cártel del Golfo (CDG) que controla la Frontera Chica”.
“Los halcones del Cártel del Noreste en Nuevo León advirtieron que la gente del CJNG estaba entrando por la carretera de Monterrey. Y ahora los antiguos zetas del CDN están de cacería en el tramo Sabinas a Nuevo Laredo. Mantienen un retén en la entrada a Nuevo Laredo durante la madrugada”
Cabe mencionar que el pasado 23 de junio se difundió un video en redes sociales, donde un supuesto sicario del Cártel del Golfo implicado en la masacre de Reynosa confesó que los ataques fueron “para que se calentara la plaza”.
Las primeras hipótesis de la Fiscalía de Tamaulipas indicaron que las células de Ciclones y Escorpiones incursionaron en la zona donde operan Los Metros con el fin de generar “desestabilización social”.
Ambos son grupos del Cártel del Golfo que actualmente libran batallas por el control regional de la llamada frontera chica, en el sureste de Estados Unidos.
La violencia en Tamaulipas se cuela en las conversaciones de los analistas en seguridad quienes aseguran que lo cometido en la entidad encaja en la definición legal de “terrorismo”.
Esta idea ha dado vueltas por los corredores de Washington, quienes proponen la inclusión de los cárteles mexicanos a la lista de organizaciones terroristas. Por su parte, el gobierno mexicano se ha opuesto a esa designación porque se describiría al país como un estado fallido.
“Nosotros no podemos hablar a la ligera de terrorismo como algunos quisieran porque eso da pie a que gobiernos extranjeros se inmiscuyan en asuntos que sólo corresponden a México, son cuestiones delicadas por eso vamos a investigar [...] Ya hay detenidos, personas que participaron en estos lamentables hechos y pidió la Fiscalía atraer el caso como lo planteamos y se está haciendo la investigación”, declaró el presidente Andrés Manuel López Obrador durante su conferencia matutina el pasado 24 de junio.
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