A casi mes y medio de que ocurrió el trágico desplome de un tramo elevado de la Línea 12 del Metro que dejó 26 personas fallecidas y más de 70 personas heridas, este miércoles 16 de junio se dio a conocer el informe preliminar sobre las causas del accidente, realizado por la empresa noruega DNV. El reporte indica que la mala construcción del viaducto elevado, ocasionó la tragedia.
Por su parte, el Colegio de Ingenieros Civiles de México realizó una inspección física del tramo elevado de la Línea 12, la cual -determinó- presenta diversas deficiencias, entre ellas una “práctica de construcción cuestionable” en las soldaduras del centro del claro.
En una conferencia de prensa otorgada el jueves 17 de junio, el Colegio indicó que al menos el 32% del tramo elevado de la Línea 12 presenta daños tipo B, los cuales requieren ser analizados y rehabilitados antes de que la vía reabra para su operación.
El consorcio integrado por ICA, Alstom y Carso Infraestructura y Construcción (CICSA), fueron los encargados de la edificación de la llamada Línea Dorada. Pero CICSA, propiedad del magnate Carlos Slim Helú, construyó el tramo elevado que abarca 11.8 kilómetros.
Tras darse a conocer los resultados preliminares del peritaje, Grupo Carso perdió 3,141 millones de pesos en valor de mercado, así lo reportó la Bolsa Mexicana de Valores (BMV). El valor de las acciones de la empresa también registraron una baja de 1.90 por ciento.
Antes de las nueve de la mañana del miércoles, la cifra se mantenía en valores cercanos al cierre del día anterior (65.92); sin embargo, con el correr de las horas presentó constantes pérdidas, hasta llegar a 64.67.
Tras la divulgación del informe sobre el accidente en la Línea 12, Carso Infraestructura y Construcción informó al periódico La Jornada que no emitiría ningún posicionamiento al respecto, puesto que se trata de un dictamen preliminar.
“CICSA no emitirá comentarios hasta que se conozca el peritaje final, dado que lo presentado hoy fue preliminar”, indicó.
Pero ahora, las miradas se dirigen al Tren Maya, una de las obras insignias del presidente Andrés Manuel López Obrador, toda vez que CICSA, construye el Tramo 2 del proyecto ferroviario.
La edificación del Tren Maya
Desde que López Obrador anunció la construcción del Tren Maya, la obra ha sido fuertemente cuestionada, sobre todo, por los enormes daños al medio ambiente, toda vez que atravesará los estados de Chiapas, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo, con 1,500 kilómetros de rieles.
El plan del presidente es lograr la equidad en el sureste del país, al conectar al sur pobre y aislado con el este rico, con sus sitios arqueológicos, sus monumentos aztecas y sus playas de arena blanca.
Numerosas agrupaciones, entre los que participan poblaciones originarias de los estados por los que correrá el Tren, se han amparado o han obtenido suspensiones provisionales para evitar afectaciones a sus propiedades y al medio ambiente.
Y es que además de que se podarán cientos de kilómetros de bosque y selva, también se teme que disminuya la disponibilidad de agua, toda vez que condiciona el ciclo de los cultivos, la tierra, el tipo de siembra y las plantas.
Pese a que existen varios amparos que impiden la construcción de algunos tramos, el proyecto continúa su avance.
De acuerdo con el presidente Andrés Manuel López Obrador, el Tren Maya deberá estar listo a finales de 2023, por lo que las empresas constructoras trabajan sin descanso para entregar en tiempo y forma la obra.
El pasado 17 de mayo, López Obrador presumió que desayunó con el empresario Carlos Slim, en su Quinta ubicada en Palenque, Chiapas, para evaluar los avances de la construcción del Tren Maya.
A través de su cuenta de Twitter, López Obrador posteó una fotografía con el magnate, acompañado del siguiente mensaje: ”Desayuné en Palenque con Carlos Slim porque estamos evaluando el avance en la construcción del Tren Maya y su empresa tiene un tramo a su cargo. También hablamos de otros temas y le mostré la ceiba más grande que tengo en la quinta”, seguido por la instantánea en blanco y negro.
Dos días después, el mandatario dio detalles sobre la reunión que sostuvo este fin de semana con el magnate, a quien calificó como un empresario “con dimensión social”.
“Platicamos con Carlos Slim. Es un empresario con dimensión social. Carlos Slim es muy institucional, respetuoso, cree en el país y está invirtiendo en México”, aseguró López Obrador.
El Jefe del Ejecutivo presumió tener “una buena relación” con el empresario (el más rico de México) y aseguró que hay “el compromiso de que va a seguir invirtiendo” en el país.
“No va a tener ningún obstáculo porque lo que necesitamos es que haya inversión en el país. Si hay inversión hay empleos, si hay empleos hay bienestar, paz y tranquilidad en México”, sostuvo López Obrador.
Desde junio de 2020, CICSA construye el Tramo 2, considerado uno de los más complejos del trazo y que va de Escárcega a Calkiní (Campeche).
Mide aproximadamente 172 kilómetros y se estima que tendrá un costo total aproximado de 18,600 millones de pesos. Justo este tramo es uno de los que ha logrado una resolución judicial para evitar el avance de la obra debido a que hay personas asentadas alrededor de las vías del ferrocarril que ya existen y operan en la zona.
Aunque el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), dependencia a cargo del plan, le ha propuesto a las familias afectadas la entrega de decenas de casas, no se ha llegado a un acuerdo con los habitantes.
Otro factor que ha representado retrasos en la construcción del Tren Maya es la pandemia del COVID-19, por lo que el propio presidente ha pedido a las empresas constructoras, entre las que se encuentra CICSA, acelerar las obras.
Hasta antes de la veda electoral por los comicios del pasado 6 de junio, CICSA y FCC Construcción, que también participa en la construcción del Tramo 2, detalló que continuaban el avance del despalme, excavación y acarreo de material, así como de la formación de terraplén, pedraplén y el desmontaje de vía.
Las otras participaciones de Carlos Slim en infraestructura
El magnate mexicano también participa con varias de sus empresas en el Programa Nacional de Infraestructura, en donde remodela o construye algunas carreteras.
Una de ellas es la autopista Mitla-Tehuantepec, en Oaxaca, la cual mide 169.23 kilómetros y requiere una inversión estimada de 13,000 millones de pesos.
Slim participa en este proyecto con IDEAL (Impulsora de Desarrollo y el Empleo en América Latina) junto con ICA (Ingenieros Civiles Asociados) para construir, ampliar, modernizar, conservar, operar, mantener y explotar la carretera durante un periodo de 40 años.
También con IDEAL, colabora en la construcción y explotación del libramiento surponiente de Guadalajara, el de Tepic y la autopista Guadalajara-Tepic, con una inversión de 8,200 millones de pesos. Igualmente, IDEAL colabora en la carretera federal Tepic-Villa Unión, que cruza a Nayarit y Sinaloa.
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