La madrugada del martes un autobús de pasajeros de la línea Futura volcó cuando circulaba por la franja fronteriza entre Tamaulipas y el estado de Texas. Doce personas murieron y 10 resultaron heridas
El titular de la Secretaría de Protección Civil del estado de Tamaulipas, Pedro Granados Ramírez, informó que nueve personas perecieron en el lugar del accidente, entre ellas el chofer, mientras que los otros tres decesos ocurrieron en el hospital.
Sin embargo, según el medio estadounidense Breitbart, una línea de investigación que manejan las autoridades es un supuesto ataque o persecución previa por parte de presuntos miembros de un cártel del crimen organizado.
Familiares de los pasajeros habrían confirmado al medio que el autobús fue víctima de un ataque en los instantes previos a la volcadura.
Pero a pesar de que el medio dijo que fuentes policiales le habían confirmado que investigaban si algún sicario había intentado detener el vehículo o si lo habían perseguido, la Fiscalía General de Justicia del Estado de Tamaulipas negó tener indicios que confirmaran esa versión.
“Ninguno (de los sobrevivientes) ha comentado haber vivido tal situación”, dijo Iván Moyle, vocero de la fiscalía. De todas maneras, agregó, continúan las indagatorias para confirmar o descartar dicha versión.
Las víctimas son derecho habientes del sistema de Salud Pública de México y viajaban con sus familiares para recibir atención médica especializada, reveló Juan Goldaracena, vocero del Instituto Mexicano del Seguro Social de Tamaulipas.
Según reportes de la Secretaría de Seguridad de Tamaulipas, Matamoros sigue siendo bastión del Cártel del Golfo, grupo que se asentó en la región desde mediados de 1980 bajo el mando de Juan García Ábrego.
Dada su dinámica de operaciones entre clanes, el Cártel del Golfo cuenta con varios cabecillas, entre quienes destacan los herederos de la familia Cárdenas Guillén, apellido del máximo líder cuando la agrupación mantenía un dominio al nivel de rivales como el Cártel de Sinaloa.
Actualmente, Matamoros estaría controlado por José Martín Cárdenas García, el Chiwilly, lugarteniente del Cártel del Golfo. Aunque también operaría otro cabecilla de la facción identificado como José Alfredo Cárdenas Martínez, el Contador.
Este último es sobrino de Osiel Cárdenas Guillén, detenido en 2003, extraditado a EEUU en 2007 y quien saldrá libre en 2028.
Tamaulipas está bajo la disputa del Cártel del Noreste, derivado de Los Zetas, y el Cártel del Golfo. La entidad ha sido bastión de cárteles de la droga porque colinda en su frontera norte con Estados Unidos, principal consumidor de estupefacientes.
SEGUIR LEYENDO: