El gobierno mexicano propondrá a Estados Unidos varias fórmulas para acordar lo antes posible la reapertura completa de la frontera terrestre común, mediante un esfuerzo extraordinario de vacunación contra el COVID-19 en su lado de la franja limítrofe, dijo el martes el canciller Marcelo Ebrard.
El funcionario se reunirá en las próximas horas con el titular de Seguridad Nacional estadounidense, Alejandro Mayorkas, quien llegó la noche del lunes al país poco antes del arribo de 1.35 millones de vacunas de Johnson & Johnson contra la enfermedad, donadas por la nación vecina.
En la habitual rueda de prensa del presidente Andrés Manuel López Obrador, Ebrard informó que explicará a Mayorkas que México “va a hacer un esfuerzo extraordinario de vacunación” usando esos biológicos, que el Gobierno pretende aplicar a personas de entre 18 y 39 años en los municipios fronterizos.
“Una vez que tengamos este avance... no habría un argumento de carácter sanitario ya para mantener esas restricciones”, consideró el canciller. México plantea relajar paulatinamente las medidas fronterizas o suspenderlas de golpe cuando se alcance una determinada proporción de inmunizados, según Ebrard.
La frontera compartida de más de 3,000 kilómetros es uno de los principales pasos limítrofes de intercambio de mercancías en el mundo por el tratado de libre comercio de América del Norte TMEC, pero también procesa cada año millones de cruces de ciudadanos de ambos países que viajan por compras o turismo.
En Estados Unidos han fallecido más de 600,000 personas por COVID-19 y la mitad de la población ha sido vacunada con el esquema completo, mientras en México han muerto 230,000 personas por la enfermedad y han sido inmunizados con dos dosis unos 15 millones de sus 126 millones habitantes.