La FGR en Durango incineró más de siete toneladas de drogas y objetos del crimen organizado

A través de la Fiscalía Especializada de Control Regional (FECOR), la Fiscalía General de la República (FGR) en la entidad federativa de Durango incineró siete toneladas 446 kilogramos 21 gramos con 200 miligramos de distintas drogas, 312 plantas de marihuana y amapola, y se destruyeron 1,120 objetos del crimen organizado.

Éstos estaban relacionados con diversas carpetas de investigación del orden federal, informó la FGR en un comunicado.

Lo destruido incluyó siete toneladas 322 kilogramos 580 gramos 300 miligramos de marihuana, 31 gramos con 500 miligramos de amapola, 100 kilogramos 328 gramos de clorhidrato de cocaína, 22 kilogramos ocho gramos con 900 miligramos de clorhidrato de metanfetamina.

Además, un kilogramo 50 gramos con 100 miligramos de opio, 22 gramos 400 miligramos de sustancia negativa y 312 plantas de amapola y marihuana, además de mil 120 objetos como mochilas y boletos de autobús, entre otros.

Personal de la FGR en Durango estuvo presente durante la diligencia de incineración: también el Ministerio Público Federal (MPF), la Policía Federal Ministerial (PFM), personal de la Coordinación de Servicios Periciales, así como elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) y de la Guardia Nacional (GN).

“Los representantes del Órgano Interno de Control de esta FGR dieron fe de la autenticidad y peso de los estupefacientes incinerados y objetos destruidos en las instalaciones de la Zona Militar”, señaló la dependencia.

La FGR, a través de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), ejecutó 57 cateos en el mes de mayo en la región noroeste del país: Baja California, Baja California Sur, Chihuahua, Durango, Sinaloa y Sonora.

Como resultado de las operaciones se informó que fueron detenidas 29 personas y se aseguraron casi 300 kilos de marihuana (298), 49 de fentanilo, así como distinto gramaje de metanfetamina, heroína, cocaína, cristal, entre otras sustancias. También fueron aseguradas 23 armas largas, 15 armas cortas, más de dos mil cartuchos, 121 cargadores y nueve granadas.

En un comunicado la FGR precisó que durante estas acciones se aseguró también dinero en efectivo en moneda nacional y extranjera, así como documentos, dispositivos móviles, medicamentos, aceite de cannabis, equipo táctico, miras telescópicas, dos lanzagranadas, diversa maquinaria y más de 21,000 litros de hidrocarburo.

La fiscalía precisó que otros tres cateos en materia de migración fueron ejecutados, dos en Baja California y uno más en Chihuahua, donde se ubicaron 37 migrantes, se detuvieron a 12 personas y se aseguraron cuatro inmuebles, cartuchos, marihuana y un arma corta.

Después de la jornada electoral de este 6 de junio, considerada como unas de las más grandes y complejas en la historia de México, el partido que se perfila como virtual ganador en los estados de Baja California —Norte y Sur—, Sonora y Sinaloa, es la coalición “Juntos haremos historia”, conformada por el Partido del Trabajo (PT), Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y Movimiento Regeneración Nacional (Morena), éste último fundado por el presidente Andrés Manuel López Obrador.

Ante este nuevo panorama político que se avecina, la reconocida periodista de investigación, Anabel Hernández, hizo hincapié en que la zona ganada por Morena también es conocida por ser el corredor de drogas del Cártel de Sinaloa.

La autora del libro Los señores del narco advirtió que la región, clave en el paso de drogas hacia los Estados Unidos, será gobernada por un mismo partido; y que por ello cabe hacerse las siguientes preguntas: cuáles serán las futuras relaciones de Morena con el cártel; cómo se establecerá la confrontación con el crimen organizado y —más importante aún— de que forma se traducirá el “tener que convivir” con la organización hegemónica sinaloense, alguna vez considerada como la más grande y poderosa del hemisferio occidental.

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