Durante la madrugada de este viernes 11 de junio las redes sociales se han inundado de gritos de protesta y de justicia por el caso de Beatriz Hernández Ruiz, la doctora de 29 años que murió luego de ser detenida por policías estatales de Progreso de Obregón, en el estado mexicano de Hidalgo.
Los hechos indican que la egresada del Instituto Politécnico Nacional (IPN), la cual se encontraba haciendo su residencia en el IMSS de Pachuca, tuvo un accidente automovilístico, por lo que los oficiales, con lujo de violencia, la aprehendieron y trasladaron sin justificar a su familia el motivo.
Un video que circula en redes sociales muestra a Beatriz Hernández en mal estado. Alrededor de ella hay, al menos, dos policías y varios testigos. Una oficial la sostiene y le coloca las manos en la cara y cuello para ingresarla a la patrulla.
“No importa, yo estoy haciendo mi trabajo”, le dice la mujer policía. Instantes después un sujeto, quien menciona que intentó ayudarla, se acerca a ella para observar su condición. Sin embargo, la médica no responde y es ingresada a la unidad oficial.
Paola Palacios, identificada como cuñada de Beatriz, señaló en redes sociales que el papá de la doctora todavía alcanzó a verla con vida en los separos, pero 15 minutos después ya estaba sin signos vitales.
“Intentaron abusar de ella, la estrangularon. Los policías salieron a decir que ella se había suicidado con una servilleta. Ella se dedicaba a salvar vidas y nos la arrebataron de la peor manera”, escribió su familiar en Facebook.
A través de un comunicado, el Gobierno Municipal de Progreso de Obregón indicó que Beatriz Hernández presentaba “características físicas atribuibles al uso de sustancias” y se suicidó dentro del área de detención primaria al colgarse “con un objeto en el cuello”.
Según su versión, los funcionarios intentaron actuar para evitar lesiones mayores. Fue trasladada al hospital más cercano, donde, al llegar, se comunicó que ya no presentaba signos vitales.
“El Gobierno Municipal extiende sus sinceras condolencias ante la pérdida ocurrida y ratifica su compromiso para colaborar con las autoridades competentes para el esclarecimiento de los hechos”, se lee en el documento oficial.
En este sentido, la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH) investigará este hecho bajo el protocolo de feminicidio, dadas las circunstancias en las que se desarrolló, el testimonio de su padre y las evidencias con las que han contado hasta el momento.
Ante esta situación, miles de mujeres y colectivas feministas se volcaron a redes sociales para pedir justicia y denunciar las irregularidades entorno al caso.
“Ella no murió por el accidente, tampoco por omisión en atención médica. A Betty la mataron, murió en manos de la policía”, escribió una usuaria de Twitter.
La versión oficial fue contradecida por los familiares, ya que trascendió que una fuente de la Fiscalía de Hidalgo dijo que la primera necropsia arrojó huellas dactilares en el cuello de Beatriz.
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