Luego de un mes de juicio, el pasado 8 de junio, Juan Francisco Picos Barrueta, alias El Quillo, fue condenado por el homicidio del periodista Javier Valdez registrado hace cuatro años, el 15 de mayo del 2017 en Culiacán, Sinaloa.
Sin embargo, Griselda Triana, viuda de Javier, aseguró que este fallo no es el final, sino un paso para llegar a Dámaso López Serrano, alias El Mini Lic, criminal al cual señala como el autor intelectual del crimen contra su occiso esposo.
“No tengo la menor duda que quien mandó a asesinar a Javier fue El Mini Lic (...) Estuve presente en todas las audiencias que se realizaron del 4 o 5 de mayo y pude escuchar y observar como los testigos principales narran como suceden los hechos, de quién viene la orden, cómo el individuo les ofrece matar al periodista incómodo de la zona del Dorado”, declaró para el programa de radio de Ciro Gómez Leyva.
Por ello, la mujer aseguró que la Fiscalía General de la República (FGR) ya giró una orden de aprehensión y proceso de extradición contra El Mini Lic, por lo cual espera que la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) intervenga para agilizar los procedimientos para enjuiciar al sujeto.
“Los tres autores materiales ya pagan, uno con su vida y dos tras las rejas. Esto aún no termina, ahora vamos por quien ordenó su muerte”, publicó en su cuenta de Facebook tras el fallo de El Quillo.
En la publicación, Griselda detalló que El Mini Lic mandó a matar a su esposo por odio y coraje, luego que Valdez lo refiriera en un artículo de su medio Riodoce como un pistolero de utilería; como alguien “a quien le gustaba exhibir sus lujos en redes sociales, el que no tenía los tamaños de su papá y el que pagaba para que le compusieran corridos”.
Por ello, declaró para Gómez Leyva, Dámaso López ordenó a varias personas que asesinaran al reportero, sin embargo, sólo El Quillo, el Diablo y el Koala fueron quienes aceptaron, por lo cual habrían recibido un pago de 100 mil pesos y una pistola.
Cabe resaltar que el pasado 2 de febrero, el criminal, actualmente preso en una cárcel de máxima seguridad en San Diego, California, declaró en un comunicado enviado por su abogado que él no tuvo ninguna participación en el asesinato del periodista; siendo así la primera y única ocasión que se expresaría ante las acusaciones en su contra por el crimen a Valdez.
No obstante, Balbina Flores, representante en México de Reporteros sin Fronteras, informó que la organización ya pidió a la Fiscalía redoblar los esfuerzos para ejecutar la orden de aprehensión en contra del autor intelectual, así como exigir que el bienestar de la familia de Javier siga bajo el mecanismo de protección a periodistas y que se dicte la pena máxima para El Quillo.
Respecto a los otros dos implicados en el crimen: El Koala fue sentenciado en 2020 a 14 años y 8 meses tras acreditarse como uno de los asesinos materiales de Valdez, mientras que El Diablo fue asesinado e incinerado en Sinaloa en 2018.
Javier Valdez Cárdenas fue asesinado el 15 de mayo del 2017 cuando salía de las oficinas del semanario Riodoce. El periodista abordó su automóvil Corolla rojo en el cual fue perseguido y calles más adelante interceptado por otro vehículo en el que viajaban tres personas encapuchadas.
Fue así que El Quillo y, presuntamente, El diablo bajaron a Valdez de su auto, lo asesinaron con 12 balazos y huyeron con su vehículo, el cual las autoridades lo localizaron ese mismo día estrellado y abandonado sobre la banqueta, aún con el motor encendido y con la palanca en Drive. Adentro estaba su mochila sin su computadora. Se la habían llevado.
“Doce disparos le habían pegado a Javier para arrancarle la vida. Doce tiros después de las doce”, escribió Ríodoce el 22 de mayo, una semana después de su asesinato.
Valdez era un periodista reconocido a nivel internacional por su cobertura del tema del narcotráfico en México, en específico del cártel de Sinaloa.
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