El día de hoy, el presidente López Obrador adelantó que en la reunión de trabajo con Kamala Harris, vicepresidenta de los Estados Unidos, “Vamos a ser testigos de la firma de un acuerdo en esta materia de migración y desarrollo”. El presidente reiteró que el enfoque del gobierno mexicano para atender el problema de la migración será “atender las causas”, es decir, brindar apoyo a los gobiernos centroamericanos donde la pobreza y a violencia obligan a las personas a salir de sus países para buscar condiciones de vida dignas.
Ante la posible firma de un acuerdo entre la vicepresidenta Kamala Harris en representación de la investidura de Joe Biden, se prevé que ambos gobiernos coordinen estrategias conjuntas para atender el conflicto migratorio. Entre las propuestas del presidente mexicano está llevar el programa “sembrando vida” que se lleva a cabo en la franja fronteriza Sur del país. Él considera que este programa sería muy bien asimilado en Guatemala, El Salvador y Honduras, de donde vienen la mayoría de los migrantes que cruzan la frontera de manera irregular hacia México.
Kamala Harris, la vicepresidenta del gobierno de Joe Biden en los Estados Unidos, es la encargada de todas las gestiones que tengan que ver con resolver el tema de la migración. Es por esto que será ella quien venga a México para reunirse con López Obrador.
El mandatario explicó el día de hoy cuál será el centro del intercambio: “El tema principal de la agenda es el de la migración, de cómo atender las causas que originan la migración. Tenemos coincidencias en que se debe de ayudar a los países centroamericanos, que se debe de invertir para que haya desarrollo, haya empleos, en Guatemala, en El Salvador, en Honduras, y que nosotros estamos en la mejor disposición de ayudar”.
Cuando se le preguntó al presidente sobre la militarización de la frontera Sur, el mandatario replicó asegurando que la presencia de la Guardia Nacional se justifica con el objetivo de cuidar de las personas migrantes:
“El plan es cuidar a los migrantes, que no haya violación de los derechos humanos y procurar darles opciones de trabajo en sus lugares de origen. Es es lo fundamental.
Y también cuidarlos para que en la travesía hacia el norte no corran riesgos de traficantes de personas y también de la delincuencia organizada.”
Para el presidente, la importancia de atender “las causas” del problema radica en que “Nadie sale de su país por gusto, lo hacen por la necesidad. En el caso de Centroamérica, además de la pobreza de siempre, se han padecido en los últimos años de temblores, de inundaciones, llovió sobre mojado. Entonces, hay que atender a la gente en sus comunidades”.
La entrada de migrantes desde países centroamericanos hacia México incrementó de manera significativa a partir del 2019. Según la Comisión Nacional de Ayuda a Refugiados (COMAR) en el 2018 hubo un total de 29,635 solicitudes de refugio por parte de extranjeros en territorio mexicano, para el 2019 esta cifra se duplicó para alcanzar las 71,230 solicitudes de refugio.
Por otro lado, también se registró un incremento en la cantidad de personas presentadas a las autoridades migratorias. En el 2018 fueron 131,445 personas las registradas, según la Unidad de Política Migratoria de la Secretaría de Gobernación (Segob). Para el 2019 la cifra llegó a 182,940 personas presentadas a autoridades migratorias.
De las personas presentadas en el 2018, el 88% fueron devueltas (115,886 personas). En el 2019, la proporción de las personas devueltas respecto de las entregadas bajó 7 puntos porcentuales, es decir, el 81% (149,812 personas) de quienes fueron presentados ante las autoridades migratorias fueron regresadas a sus países de origen.
Para el 2020, debido a la pandemia por la COVID-19 y los cierres en las fronteras, las cifras sobre migración se redujeron considerablemente. Durante todo el año pasado, fueron presentadas 41,179 solicitudes de refugio. Aunque siguen siendo más de las registradas en el 2018, distan considerablemente de las que las 71,230 que la COMAR registró en el 2019.
Por otro lado, también cayeron los “eventos de extranjeros presentados ante la autoridad migratoria” que captura la Segob. La cifra total para todo el 2020 fue de 87,260 personas, de las cuales un 61.7% (53,891 personas) fueron regresadas a sus países natales.
El 2020 se caracterizó por la disminución de la entrada de migrantes por la frontera Sur mexicana, pero también estuvo marcada por la paralización de los trámites de personas migrantes que quedaron varadas en el lado mexicano de la frontera entre México y los Estados Unidos.
También, durante el año pasado, los huracanes Eta e Iota devastaron la región centroamericana, especialmente a Honduras. Organizaciones que se dedican a la atención de migrantes predijeron la entrada de nuevas caravanas de personas forzadas a salir de sus países por las condiciones de pobreza acentuadas por el paso de las tormentas. Al respecto, López Obrador recalcó que a los hondureños les “llovió sobre mojado”.
De tal forma que para el 2021 ya hay indicios de que se superaran todas las cifras de entrada de migrantes hacia territorio mexicano que se tenían hasta el momento. Para el mes de mayo de 2021, ya se superó la cantidad de solicitudes de refugio que la COMAR recibió en todo el 2020.
Con 41,192 solicitudes registradas en los primeros 5 meses del año, también se marca una tendencia a superar las cifras que se registraron en el 2019. Durante ese mismo lapso de tiempo, la COMAR recibió 24,551, poco menos de la mitad de las que de las que van hasta el momento.
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