Carlos Slim Helú, de ascendencia libanesa, es el hombre más rico de México con una fortuna que asciende a los 55 mil 930 millones de dólares, según Forbes. Además, el magnate de las telecomunicaciones también figura como uno de los personajes más ricos del mundo y en el ranking Billonaires, encabezado por Jeff Bezos, fundador y director ejecutivo de Amazon, empresa de ventas online.
Pese a que Slim actualmente ocupa el puesto número 16 en la famosa lista mencionada anteriormente, el empresario mexicano fue por cuatro años el hombre más rico del mundo. En 2010, el magnate desbancó la fortuna del cofundador de Microsoft, Bill Gates; con quien se disputó los primeros lugares del ranking hasta el año 2014, cuando hubo un salto en las acciones de la compañía del informático.
De acuerdo con algunos analistas, el empresario mexicano dejó de ser la personalidad más rica del planeta debido a la reforma en materia de telecomunicaciones aprobada en México durante el año 2014. Esta modificación permitió la apertura y llegada de nuevas empresas extranjeras para ofrecer los servicios que, hasta ese momento, lideraba Carlos Slim a través de sus compañías.
El Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) declaró a América Móvil preponderante en México, por lo que exigió compartir infraestructura con sus competidores e impuso tarifas de interconexión. Estas resoluciones impactaron los resultados, ya que la empresa obtenía el 31% de sus ingresos en México, así lo apuntó Forbes.
Antes de la apertura de nuevas compañías, su propiedad empresarial América Móvil dominaba el mercado de la telefonía móvil en México y, por su parte, Telmex lideraba con sus servicios de telefonía fija. Según algunos expertos, para que Slim pudiera mantenerse a la cabeza del ranking, necesitaba invertir fuertes cantidades de dinero en cuanto a la cobertura tecnológica y también en ofrecer mejores servicios que le permitieran ampliar su cartera de clientes.
Además, a la reforma de telecomunicaciones se le sumó la incursión del empresario al mercado de contenidos digitales mediante las plataformas de UnoTV y Claro Video, cuyos usuarios únicos aún no lograban los números esperados. UnoTV, propiedad de América Móvil al igual que Telcel, obtuvo 4,7 millones de usuarios únicos desde móviles, con una baja de 22,7%, con lo que registró su peor número desde octubre del 2015.
Otro golpe que tuvo un impacto negativo en la fortuna del empresario fue la incursión al mercado de la compañía estadounidense AT&T, que en 2014 compró las acciones de las compañías Nextel y Iusacell, que anteriormente habían sido propiedad de Ricardo Salinas Pliego y de Grupo Salinas.
La estrategia que adoptó la compañía norteamericana ofrecía paquetes de datos a precios mucho más accesibles que los ofrecidos por Telcel, lo que trajo como consecuencia que los clientes de telefonía móvil optaran por los servicios de AT&T, sobretodo jóvenes y personas de bajos recursos que no tenían acceso a los bienes debido a las elevadas tarifas de la propiedad empresarial de Carlos Slim.
Asimismo, la empresa minera Frisco, también dirigida por el magnate de las telecomunicaciones, registró una pérdida de mil 294 millones de pesos durante el último trimestre del año 2012 y la compañía de servicios financieros Grupo Inbursa tuvo pérdidas, ya que el precio de sus acciones se contrajeron en 18.5% para el año 2015 y también hubo una depreciación de la moneda, lo cual se vio reflejado en los bajos valores de las acciones de Carlos Slim y en una reducción del casi 11% del total de su riqueza.
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