A lo largo de la historia de México se han presentado una serie de personajes que han manchado su imagen a tal grado que hoy en día son recordados como villanos y traidores a la patria.
Hernán Cortés, Antonio López de Santa Anna, La Malinche, Victoriano Huerta, Porfirio Díaz, son sólo algunos los personajes recordados con resentimiento dentro de los libros que narran nuestra historia.
En 1519, Hernán Cortés llegó al continente americano en donde logró someter al Imperio Azteca, y establecer la Nueva España.
La última petición que Hernán Cortés escribió en su testamento que su cuerpo fuese enterrado en la Nueva España, ahora México, pese a ser una nación que lejos de alabarlo y honrarlo, lo cataloga como un personaje invasor. La tumba de Cortés es un muro de la iglesia de Jesús de Nazareno ubicada en República del Salvador 119, en el Centro Histórico de la capital mexicana.
Antonio López de Santa Anna es otro de los personajes recordados con gran resentimiento, pues se le acusa de ceder parte del territorio nacional a Estados Unidos. Sin embargo, pocos saben que a este sólo le corresponde el traspaso de La Mesilla, que comprende una extensión de 76 845 kilómetros cuadrados.
Fue Manuel del la Peña y Peña quien firmó el tratado de Guadalupe-Hidalgo el 2 de febrero de 1848, mismo por el que se perdieron los estados de California, Arizona, Nevada, Utah, parte de Colorado, Nuevo México y Wyoming.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México (INEHRM), Santa Anna fue presidente seis veces, comenzando su primer periodo en 1833.
Los restos de del ex presidente se encuentran junto con los de su esposa, Dolores Tosta, en el Panteón del Tepeyac.
La Malinche es uno de los personajes que más controversia ha generado dentro de la historia de México por haber manteniendo una relación con el conquistador Hernán Cortés. Malinalli fue su nombre original, pero Cortés no podía pronunciarlo.
Es considerada villana ya que mencionan que su acciones no fueron fieles a los mexicas, sin embargo, ella sólo actuó bajo las órdenes de los españoles. Su intención era obtener la libertad deseada pero no imaginó que quitar del trono a Moctezuma significaría la caída de Tenochtitlán.
Se pensaba que La Malinche estaba enterrada en Jilotepec, Estado de México, sin embargo, en marzo de 1931, según México al Día, personal del Museo Nacional de Arqueología e Historia acudieron al lugar pero lamentablemente no encontraron ningún rastro.
Victoriano Huerta es recordado por haber traicionado la lucha de Francisco I. Madero, así como también se le atribuye el haber mandado a dar la orden de su fusilamiento junto con José María Pino Suárez tras una emboscada en la que también se capturó al general Felipe Ángeles.
Después de la renuncia de Pedro Lascuráin, Victoriano Huerta ocupó el cargo de presidente.
La tumba del ex presidente Huerta se encuentra en el panteón Evergreen, en El Paso, Texas, el más antiguo de esa ciudad.
El general José de la Cruz Porfirio Díaz Mori fue un personaje de la Revolución Mexicana recordado por haber modificado la constitución con el fin de extender su mandato. Díaz estuvo a cargo del poder 30 años, del 28 de noviembre de 1876 hasta el 25 de mayo de 1911.
Porfirio Díaz llegó a la presidencia mintiéndole a la sociedad mexicana, pues él mencionaba que no iba a reelegirse. motivo por el cual derrocó a Lerdo de Tejana.
Fue un presidente que admiraba el estilo de arte europeo, por lo que procuró traer ese tipo de construcciones a México. Se le atribuyen la construcciones de las primeras líneas de ferrocarriles, y el haber iniciado la edificación del Palacio Nacional de Bellas Artes.
Los restos de Díaz se encuentran en el cementerio de Montparnasse en Paris, Francia, lugar donde también están enterradas reconocidas personas como Jean-Paul Sartre, Simone de Beauvoir y Julio Cortázar.
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