La noche de este lunes 24 de mayo se dio a conocer que Andrés “N”, feminicida de 72 años detenido en el municipio de Atizapán, en el Estado de México, fue trasladado al Centro de Reinserción Social de Tenango del Valle, luego de que reos del penal de Barrientos, donde se encontraba recluido, intentaran asesinarlo.
El hecho fue confirmado por Sergio Baltazar, abogado de la familia de Reyna González, una de las mujeres asesinadas por Andrés “N”.
En entrevista con Azucena Uresti, Baltazar ofreció algunos detalles sobre el traslado del feminicida.
“Se estaba programando una nueva audiencia para el efecto de resolver peticiones, precisamente del señor Andrés, a efecto de que al parecer había sufrido un atentado contra su vida adentro del penal y era necesario cambiarlo a otro Centro de Reinserción Social”, explicó el abogado para el programa radiofónico de Grupo Fórmula.
Tras ser capturado y confesar los asesinatos que cometió, Andrés “N” fue canalizado a prisión mientras se realizan las investigaciones correspondientes y se recaban más elementos de los hechos de los que es responsable.
Inicialmente fue enviado al Centro de Reinserción Social de Tlalnepantla, mejor conocido como “Barrientos”, pero en ese lugar sufrió un atentado de parte de algunos reclusos que se enteraron de sus actos.
De acuerdo con información de Sergio Baltazar, la directora de Barrientos fue quien decidió “mover” al feminicida para evitar que fuera asesinado por los demás reclusos.
“Había al parecer sufrido un atentado, creo que lo querían privar de la vida dentro de ese centro penitenciario. No se tenían las medidas o seguridad necesaria, entonces la directora solicitó audiencia para que fuera trasladado a otro centro preventivo”, agregó.
“Se enteraron lo que hacía este señor y consecuentemente, como esto fue a nivel nacional, pues muchos reos ahí se enteraron y quisieron atentar contra su vida”, también dijo.
Al final, Baltazar señaló que el hombre aceptó que cometió la conducta y que probablemente en rango mayor puede ser condenado de por vida, es decir, prisión vitalicia.
Según sus propias declaraciones, durante su audiencia del pasado 20 de mayo, el feminicida solía engañar a sus víctimas en centros nocturnos. Luego las llevaba a su casa donde las asesinaba con apuñaladas en el corazón para luego cercenarlas y enterrarlas en su sótano.
Asimismo, declaró que también solía arrojar sal a los cuerpos para conservarlos, sin embargo, a pesar que aceptó practicar actos de canibalismo, las autoridades no han podido comprobar esta declaración.
La pericia de este Andrés “N” al cortar la piel se explica luego que varios vecinos relataran que trabajó por varios años en un rastro de preparación de carne para consumo humano en Tlalnepantla; de ahí la precisión de los cortes para separar la piel del músculo.
Andrés “N”, el presunto feminicida de Atizapán de Zaragoza, guardaba en una de sus libretas una lista, escrita a mano, con nombres de mujeres que probablemente fueron sus víctimas.
De acuerdo con la fiscal central de Género del Estado de México, Dilcya García, los restos y pertenencias halladas en su casa podrían ser únicamente de cinco personas aproximadamente.
Por otra parte, las identificaciones halladas en su casa fueron tres, mismas mujeres que ya fueron identificadas dentro del registro de personas desaparecidas, pero las víctimas pudieran ser más.
“El Chino”, como era conocido por sus vecinos, llevaba una lista detallada con los nombres de por lo menos 29 mujeres que, hasta el momento, se sospecha fueron asesinadas por el sujeto detenido, de acuerdo con lo revelado por Dilcya García para Grupo Fórmula.
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