El luchador Einar Dharius, “El Vikingo” fue detenido por elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México por azotar contra el suelo a un niño durante una función de lucha libre en la alcaldía Venustiano Carranza.
Dicho incidente ocurrió el viernes 21 de mayo cuando el sujeto identificado ante las autoridades capitalinas como Víctor “N” se encontraba participando, junto a otros colegas, en un evento de entretenimiento al aire libre en la colonia Aviación Civil.
La agresión se llevó a cabo cuando El Vikingo se encontraba tirado en el pavimento a un lado del cuadrilátero, cuando la víctima, de cinco años, se acercó para tomarlo por la espalda. De acuerdo con algunos testigos, el niño sólo lo estaba abrazando para darle ánimos, pero el sujeto tomó al infante del brazo y luego lo lanzó bruscamente contra el piso.
Una grabación circuló en redes sociales para atestiguar el momento e indignar a los usuarios. Momentos después se informó de la detención del luchador para ser llevado a la Fiscalía Desconcentrada de Investigación (FDI) Venustiano Carranza 3, donde se presentó la denuncia correspondiente.
Sin embargo, la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ-CDMX) dejó en libertad a Víctor Cruz Pallares, de 21 años, pues tras la revisión de las lesiones ocasionadas contra el menor se determinaron como leves y el luchador puede reincorporarse a su vida normal.
De acuerdo con el Artículo 288 del Código Penal Federal (CPF), las lesiones se entienden como no solamente las heridas, escoriaciones, contusiones, fracturas, dislocaciones, quemaduras, sino toda alteración en la salud y cualquier otro daño que deja huella material en el cuerpo humano, si esos efectos son producidos por una causa externa.
La sanción aplicable dependerá de la gravedad de las lesionadas, las cuales se clasifican en las que pueden sanar en un periodo no mayor a 15 días y en las que se tarden más. En caso de que las lesiones presentadas pertenezcan al primer rubro, se considerarán como leves y se “impondrán de tres a ocho meses de prisión, o de treinta a cincuenta días de multa, o ambas sanciones a juicio del juez”.
En caso de que sean heridas que tarden más en sanar, el Artículo 289 del CPF indica que se “impondrán de cuatro meses a dos años de prisión y de sesenta a doscientos setenta días multa”, de acuerdo a la valoración del juez.
De este modo, se infiere que en caso de que se ratifique que las lesiones ocasionadas contra el niño sean consideradas como leves, el luchador sólo enfrentaría, por mucho, una pena de ocho meses de prisión; sin embargo, esto no significa que el agresor permanecerá impune ante la sociedad y las autoridades internas de la lucha libre.
José Contreras, titular de la Comisión de la Lucha Libre de la Ciudad de México, informó que El Vikingo será suspendido indefinidamente e instó a que esta suspensión aplique en todas las entidades de la república. Aunado a esto, especificó que la función en la que ocurrió la agresión era un “evento clandestino de lucha libre”, mismo que fue presuntamente organizada por un partido político.
En dicha función, se contó con la presencia de más luchadores: Kaled, Black Vento, Rey Oso, Tupak, Baby Angelita, Diosa Nix, Velkator, El ágil, Ozumai Otai, entre otros, motivo por el cual descalificó el actuar de El Vikingo hacia con el niño e instó a sus colegas a no participar en estos eventos.
Por su cuenta, Cibernético, un reconocido luchador mexicano con más de 20 años de carrera, condenó lo realizado por El Vikingo y lo llamó luchador “mulero”. Asimismo, él y otros profesionales del cuadrilátero solicitaron por redes sociales ponerse en contacto con el niño para hablar con él, hacerlo sentir mejor y demostrarle que la lucha libre es un deporte noble.
“Lo que aquí es importante es la salud del niño y que no se vaya con una mala imagen de la lucha libre”, declaró el luchador en un video que circuló en Facebook y Twitter. Además, insistió en retirarle la licencia de luchador al agresor.
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