La Fiscalía del Estado de Jalisco investiga el asesinato de dos mujeres, registrados durante este martes, bajo el protocolo de feminicidio. Los crímenes fueron perpetrados en los municipios de Tlaquepaque y de Cuquío.
Las indagatorias ocurren en el marco de la marcha llevada a cabo en Guadalajara, capital de la entidad federativa, donde se exigió justicia por el secuestro y homicidio de los hermanos González Moreno.
En Tlaquepaque, una mujer fue hallada dentro de un canal de aguas negras localizado en la carretera San Martín Al Verde, a la altura de la colonia San Martín de Las Flores, declararon autoridades policiacos.
Vecinos de la zona reportaron el descubrimiento del cadáver al número telefónico 911 de los servicios de emergencia. Tras la denuncia, elementos de seguridad arribaron al área para comenzar con las indagatorias y trasladar el cuerpo al Servicio Médico Forense.
En el municipio de Cuquío fue encontrada una mujer dentro de su domicilio ubicado en la calle Silvano Sánchez. El cuerpo de la víctima registraba heridas de balas de armas de fuego. La Fiscalía del Estado informó que “fue localizada en el comedor, sentada en una silla y a simple vista presentaba una herida producida al parecer por proyectil de arma de fuego a la altura del mentón, con orificio de entrada únicamente”.
Gerardo Octavio Solís, titular de la Fiscalía del Estado de Jalisco, declaró este lunes que se mantienen dos líneas de investigación sobre el homicidio de tres hermanos que el viernes pasado fueron sacados de su propio domicilio por un comando armado: se trata de un ataque directo contra ellos o una confusión.
El grupo después ejecutó a las víctimas y desechó sus cadáveres a un costado de la carretera ubicada en San Cristóbal de la Barranca.
Ese viernes, treinta minutos después del secuestro de los hermanos González Moreno por sujetos armados, encapuchados, y presuntamente con chalecos con las insignias del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), se registró un atentado contra un automóvil en el que viajaba una persona protegida por elementos de la Fiscalía General de la República (FGR).
El sobreviviente del ataque, no identificado por Solís, declaró que vivía en la misma calle que los tres hermanos, ubicada en la colonia San Andrés.
“Al parecer los jóvenes llevaban una vida aparte, no sé si podrían tener una relación vecinal. Siempre existe la posibilidad, nunca la dejamos de lado, sabemos que estos grupos del crimen organizado tienen que actuar de manera rápida y siempre existe la posibilidad de que hubieran cometido un error”, señaló el fiscal a través de una conferencia de prensa virtual.
La agresión contra el sujeto sin identificar y el personal de la FGR ocurrió en Tlaquepaque, media hora después del secuestro de los hermanos identificados como Ana Karen, de 24 años de edad; José Alberto, de 29 años y estudiante de Geografía en la Universidad de Guadalajara, y Luis Ángel, de 32.
Junto a los cadáveres de las víctimas, según La Jornada, autoridades hallaron una manta con una amenaza en contra del gobierno: el texto advertía que los agentes policiacos no deben vestirse como civiles y patrullar en vehículos sin identificación porque si lo hacen, ocurrirá otra vez lo que le sucedió a los hermanos González Moreno.
Según la versión de los familiares, al menos ocho sujetos encapuchados con armas largas y chalecos con supuestas insignias del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) irrumpieron en el domicilio de los hermanos.
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