La disminución de agua en la presa La Purísima en el municipio de Irapuato, del estado de Guanajuato, ha dejado en descubierto a la antigua Iglesia de la Virgen de los Dolores, la cual fue construida a mediados del siglo XIX. Este templo, así como también la comunidad de El Zangarro, fueron sepultados en el año de 1979 tras la construcción de dicha presa.
El mandatario de ese entonces, José López Portillo, dio la orden de construir La Purísima después de que Irapuato se inundara tras el desborde de la presa El Conejo el 8 de agosto de 1973. La nueva presa fue construida para a evitar futuras inundaciones, sin embargo, mil 200 hectáreas quedaron sumergidas bajo el agua.
“Hoy se conserva bastante bien, y se puede apreciar por la disminución del agua de la presa ante la escasez de lluvias en los últimos años, el paisaje que guarda esta ruina es muy bonito, vuelan cantidades de aves, merodean a las personas en sus lanchas y la vista es hermosa del Cerro del sombrero”, comentó la directora del archivo municipal, Dulce Vázquez al diario Milenio.
La comunidad que habitaba El Zangarro, fue movilizada cerca del bordo de la nueva presa, lugar al que llamaron con el mismo nombre de su antiguo hogar.
“La historia oral cuenta que les fue muy difícil salir del lugar, no solo por las construcciones, sino por el sentido de pertenencia al lugar… Algunos resistieron hasta que vieron que ya era una realidad que llegaría el agua. para cubrir toda la ciudad “, detalló Dulce Vázquez.
Actualmente, el nivel de la presa La Purísima está al 50% de su capacidad. Otras de las presas más importantes en el Estado, como La Ignacio Allende y La Yuriria se encuentran en estado crítico como consecuencia de las bajas lluvias y altas temperaturas, ambas cuentan con al 15% de su capacidad, 2% menos que el año pasado.
“Tenemos alrededor de 400 mil habitantes en esta situación de riesgo, ¿esto qué significa? que el volumen de agua que se les provee ha bajado de manera considerable, entonces necesitamos generar una dotación igual a la de sus necesidades vitales”, informó Fernando García León, director de la Comisión Estatal del Agua de Guanajuato (CEAG).
Según datos de la CEAG, el periodo de abril-mayo del presente año la sequía ha sido un 25% más que años pasados, sin embargo, se espera que la temporada de lluvias de junio y julio pudieran ser más intensas a las del 2020.
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