El Senado entra en una carrera contrarreloj para despenalizar el uso lúdico de la marihuana en México

El Senado mexicano vive horas cruciales con respecto a la posible aprobación –o no– de la despenalización y regulación del uso lúdico de la marihuana en todo el país, en una carrera contrarreloj para el Congreso, que tiene hasta el 30 de abril para legislar sobre el tema por orden de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).

“Esta semana se reúnen las comisiones para determinar si podemos modificar el Dictamen y regresarlo a la Cámara de Diputados”, detalló Ricardo Monreal, el líder de los senadores de Morena, el partido de la mayoría en el Congreso.

“Creo que la mayoría de los grupos parlamentarios, cuando no la totalidad, han sostenido y comentado que no estarían de acuerdo como el Dictamen viene de la Cámara de Diputados, por las inconsistencias constitucionales y por algunos temas que están pendientes”, indicó.

Esto provocaría una serie de problemas. Si el Senado modifica el dictamen proveniente de San Lázaro, el documento deberá volver a manos de los diputados, que deberán revisar nuevamente los cambios y, en caso de estar de acuerdo, finalizar el proceso. Pero, en caso de que vuelvan rechazar las propuestas del Senado, el proceso legislativo podría derrumbarse.

El Congreso mexicano además debe cumplir con la prórroga, la cuarta, que otorga la Suprema Corte para legislar sobre el tema, y atender el cierre de sesiones ordinarias. Ambas fechas límite se cumplen el 30 de abril. Ante tanta urgencia, las cosas se moverán en el Senado rápidamente para salvar este dictamen.

“Nos quedan unos días para poder modificar el dictamen, regresarlo en los términos que lo habíamos comentado (a San Lázaro), mejorarlo y eliminar las inconsistencias constitucionales que pueden provocar recursos jurisdiccionales en los juzgados federales. Eso es lo que estamos intentando hacer, pero todavía quedará de aquí a la próxima semana para poder dictaminar”, dijo Monreal.

Ahora mismo, dos comisiones, la de Justicia y la de Estudios Legislativos, Segunda, han aprobado el dictamen. Pero la comisión de Salud del Senado todavía no se ha reunido a discutirla, para en su caso darle el visto bueno y pueda pasar al Pleno.

“Las comisiones tienen todo el derecho, y la autonomía, y la independencia, para decidir si se puede modificar. Lo que sí veo es que hay un consenso completo de que no nos allanemos a las reformas o modificaciones que hicieron al proyecto enviado por la Cámara de Diputados”, remarcó Monreal. Es por ello que el documento seguramente volverá a San Lázaro.

Monreal aseguró que en los próximos días, antes de que culmine el fin de semana, las comisiones tendrán listo el dictamen para enviarlo al Pleno. “Nos quedan tres sesiones solamente, pero también las sesiones extraordinarias que se necesiten, estamos dispuestos a celebrarla”, abrió la puerta Monreal.

Por último, Monreal aseguró que no piensan en pedir una nueva prórroga a la Suprema Corte para poder legislar el tema. Y es que el 30 de abril además cerrará su periodo de sesiones ordinarias la LXIV Legislatura. Cuando el Congreso reconvenga en septiembre, sin contar las posibles sesiones extraordinarias que se puedan llevar a cabo, lo hará con una nueva conformación de la Cámara de Diputados.

Y es que el 6 de junio, en el marco de las elecciones intermedias del país, se renovarán los 500 escaños en la Cámara de Diputados, donde ahora mismo Morena es favorito en las encuestas para mantener su amplia mayoría.

“Realmente no se ha dicho si se va a solicitar o si la Corte queda en disposición de declararla inconstitucional, las cinco normas jurídicas que impugnó en su resolución”, indicó Monreal. La Corte, cuando termine la prórroga, podría emitir la declaratoria de inconstitucionalidad de las leyes que pidió reformar y legislar al Congreso, desatando un nuevo problema que por ahora no se encuentra en la lista de prioridades del Poder Legislativo, enfocado en completar el extenuante proceso la próxima semana.

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