Un gato fue detenido el pasado viernes cuando intentaba ingresar a una cárcel panameña con droga envuelta en su cuerpo, informaron las autoridades del país centroamericano.
El felino fue sorprendido por custodios y unidades policiales en las afueras de la cárcel Nueva Esperanza, en la provincia caribeña de Colón, unos 80 kilómetros al norte de Ciudad de Panamá.
“El gato transportaba posiblemente cocaína, crack y marihuana”, indicó el fiscal de drogas de Colón y Guna Yala, Eduardo Rodríguez a través del canal Telemetro.
En las cárceles panameñas, las autoridades han descubierto ingeniosas maneras para tratar de transportar estupefacientes, por medio de palomas, drones y en esta ocasión un felino que no se escapó de la astucia de los policías.
La Fiscalía de Panamá manifestó tras la captura del gato, que se han iniciado investigaciones en cuanto a la utilización de animales para este delito en el centro penitenciario Nueva Esperanza, también agregó el funcionario que el animal fue entregado a un centro de adopción.
Según los informes, el gato fue interceptado cuando se dirigía a la cerca perimetral del centro penitenciario, que alberga a más de 1,700 presos.
“El animal tenía una tela amarrada al cuello que mantenía dos envoltorios” con “materia vegetal, cuatro envoltorios forrados de plástico transparente de polvo blanco y otro con hojas”, explicó Andrés Gutiérrez, director general del Sistema Penitenciario panameño.
Las autoridades sospechan que, para transportar droga, los animales son engañados con comida desde las cárceles para hacerlos regresar con las sustancias ilícitas.
En México el latas, frutas otras insólitas tretas
Peluches, bolillos, dulces artesanales, mole, latas de chile son algunas de las formas como los grupos delictivos han intentado abastecer droga al bajo mundo.
En los últimos años, las autoridades han descubierto métodos ingeniosos para traficar droga.
Uno de los hallazgos ocurrió el 16 de marzo de 2019,en una paquetería de Puerto Vallarta, Jalisco, cuando la entonces Policía Federal encontró dos peluches con cocaína, usados para enviar la mercancía a la Ciudad de México.
Sin embargo, no fue el primer hallazgo de ese tipo. Antes, el 24 de enero, oficiales de Guadalajara detuvieron en la Colonia 18 de marzo a un hombre que llevaba consigo una vaca de peluche que contenía un envoltorio con 28 gramos de crystal.
Los cárteles han usado otros métodos para vender droga. No sólo los peluches atraen a quienes trafican, pues el 7 de agosto de 2018, autoridades hallaron en el aeropuerto de Guadalajara cuatro bolillos con 120 gramos de cocaína, que serían enviados a California, Estados Unidos.
En la terminal aérea, también los dulces artesanales fue otro lugar en que intentaron ocultar drogas. La Policía Federal halló cinco canastas con un kilo 650 gramos de marihuana.
Otro alimento utilizado fue el mole. El 1 de septiembre de 2017 una cubeta etiquetada con dicho producto fue asegurado en el aeropuerto de Guadalajara. Dentro del recipiente hallaron 20 kilos de metanfetamina.
La cubeta de mole levantó sospechas por el destino de la misma (Estados Unidos). Al revisar el contenido, identificaron una pasta café cuyo análisis dio positivo.
SEGUIR LEYENDO: