Meylin del Socorro Obregón Leiva de 30 años, madre del menor hallado abandonado en el desierto de Texas, ya fue liberada tras estar secuestrada por mafiosos en Tamaulipas, confirmaron sus familiares.
“Ya salí del martirio. Dios me cuidó, sólo él sabe lo que sufrimos tanto. Yo doy la vida por mis hijos, son sangre de mi sangre, nunca los hubiera dejado solos”, le dijo la mujer este jueves a su hermano Misael Obregón en una llamada telefónica cuando éste era entrevistado por Telemundo.
“No tengo palabras para explicar la alegría tan grande de volver a abrazar a mi niño y saber que estamos bien los dos”, añadió.
La mujer originaria de Nicaragua explicó que no sabe porqué la soltaron, pero cree que fue por la presión social y los medios que alertaron del secuestro a la Interpol y a las autoridades de Estados unidos, México y de su propio país.
“Sería por las noticias, no sé, no lo sabría explicar, ellos solo me dijeron que me alistara, que no les convenía tenerme allí, me dijeron que me iban a ir a dejar a otro lugar a una parte sola, no había nada ahí”, explicó Meylin Obregón, mamá de Wilton Gutiérrez, el menor de 10 años que deambulaba solo en el desierto de Texas y fue rescatado por agente fronterizo.
Sus captores la dejaron en un punto fronterizo, que ella, dice, no pudo ubicar.
“Como me dejaron ahí, un lugar donde yo no conocía, yo no sabía dónde ir, entonces ahí pedí ayuda y ya me mandaron a una casa más seguro”, dijo.
Meyln se entregó a las autoridades fronterizas de Estados Unidos, donde al parecer le será otorgado el asilo.
“Sí, por lo que tengo entendido sí me van a dar asilo”, señaló.
Este miércoles habló por teléfono con Wilton, quien está en un centro de detención de menores en Donna, Texas y cuyo único deseo es volver a encontrarse con él.
“Estaba un poco preocupado, él, estaba así por lo que lo querían pedir para atrás. Yo le dije que no se preocupara, que no llorara, que no se afligiera, le dije que todo iba a salir bien y que pronto íbamos a estar juntos”, refirió la mamá de Wilton.
Huyó del maltrato de su esposo
De acuerdo con la madre de Meylin, Socorro Leiva, su “hija huyó de una mala relación”, de una pareja que le era infiel, la humillaba y maltrataba. “A mi hija la corría de la finca a cada rato. Le restregaba las mujeres en la cara; una vez le echó las vacas encima. No estoy segura si la agredió físicamente, pero ese hombre cualquier cosa le podía hacer. Ella regresaba a la finca de Lázaro por amor a sus hijos, pero después de 12 años de relación, ella ya no soportó más, pero él le dijo que si después encontraba a otro hombre a los dos los mataría”, aseguró la abuela a los medios de Nicaragua.
Meylin inició su travesía a Estados Unidos, el pasado 7 de febrero junto a su hijo y dos sobrinos, hijos de Misael. En un primer intento solo pudieron cruzar la frontera los dos hijos de Misael, Meylin y el menor (Wilton) fueron devueltos a México. En un segundo intento ambos fueron secuestrados.
El hermano de Meylin fue quien recibió la llamada de extorsión, en la cual le informaron el secuestro de ella y su sobrino Wilton, sin embargo él sólo pudo pagar el rescate del menor.
Fue cuando lo dejaron en libertad y presuntamente habría cruzado la frontera con un grupo de personas, quienes lo habrían dejado solo durante la noche en el desierto de Texas, cuando fue encontrado por un agente de la Patrulla Fronteriza de los Estados quien grabó con su celular el desgarrador momento en el que Wilton le suplicó llorando por ayuda.
De acuerdo con Telemundo, Misael Obregón-quien vive en Florida- tuvo conocimiento del paradero de Wilton debido a que un amigo de Nicaragua le envío el audiovisual que circuló en medios.
Según el testimonio del familiar, el menor y su madre salieron de su país de origen, pues el padre del infante los maltrataba. Asimismo, al trayecto también se unieron los dos hijos de Misael, no obstante, aunque todos lograron cruzar una vez la frontera hacia Estados Unidos, la policía fronteriza los retornó a México y, posteriormente, Wilton y su madre fueron privados de su libertad.
“Me dijeron que estaba ella y el niño y que si yo no pagaba, no salían de ahí (...) yo sólo pude pagar por el rescate del niño”, expresó Misael, después de recordar que había recibido una llamada en donde le informaban que su familia estaba privada de la libertad.
Aunado a lo anterior, el tío de Wilton mencionó que pagó 5 mil dólares para que dejaran libre al menor, por tanto, los secuestradores lo abandonaron y dejaron a su suerte cerca de la frontera, lugar en el que fue encontrado.
Por su parte, la abuela del infante también habló con Telemundo y destacó que en Nicaragua toda la familia también se encontraba muy preocupada por la situación.
“(Cuando vi el video del niño) Yo lloré de alegre, sentí orgullosa de ese niño, de cómo se enfrentó (con la situación) y le pedía ayuda a la gente”, recalcó la mujer de la tercera edad.
Respecto a los dos primos que también realizaron el viaje con Wilton y su madre, ellos lograron cruzar por sus propios medios a Estados Unidos y se encuentran a salvo.
Hasta la fecha, el menor rescatado se ubicó a en un albergue de Texas y su madre continúa secuestrada en México. Sin embargo, Misael ha comenzado con los trámites correspondientes para poder hacerse cargo de Wilton, pese a ello, si su madre no aparece podría ser devuelto a Nicaragua para que quede bajo el resguardo de su padre biológico.
Cabe recordar que el pasado 6 de abril se hizo viral el video en el que, con lágrimas en los ojos, Wilton caminaba hacia una patrulla fronteriza y pedía ayuda porque lo habían dejado “botado” cerca de Río Grande.
—¿Me puede ayudar?—, imploró el menor al comienzo de la grabación.
—¿Qué pasó?— le respondió el agente.
—”Es que yo venía con un grupo de personas y me dejaron botado y no sé dónde están—, le explicó el niño, que no pudo contener las lágrimas.
Según los primeros informes, el incidente ocurrió el pasado 1 de abril, luego de que el agente fronterizo concluyera su turno laboral.
—No sabes dónde están, ¿te dejaron solo?—, continuó el oficial que grabó al menor.
—Me dejaron botado, solo—, respondió.
—¿No vienes con mami o con papi o con alguien?—, le preguntó el agente.
—¡Nadie, yo venía en un grupo… y al final me dejaron botado y vine aquí a pedir auxilio!—, exclamó el pequeño, —yo vengo, porque si no, ¿a dónde me voy a ir?, tal vez me pueden robar, secuestrar o algo y tengo miedo.
La grabación fue tomada solo dos días después de que la Patrulla Fronteriza de EEUU publicara un video de vigilancia que mostraba a traficantes de personas arrojando a dos niñas de Ecuador desde lo alto de un muro fronterizo en el desierto de Nuevo México.
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