En una reforma denunciada como un paso más hacia la militarización de México bajo el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, la Cámara de Diputados aprobó este martes una reforma que permitirá la inclusión de las fuerzas armadas, es decir el Ejército y la Marina, en el Consejo de Ciencia y Tecnología del país.
El Pleno en San Lázaro aprobó, por 426 votos a favor, 14 en contra y una abstención el dictamen a la minuta con proyecto de decreto por el que se reforman y adicionan diversas disposiciones de la Ley de Ciencia y Tecnología.
La modificación al artículo 5, fracción II, es para señalar que en el Consejo General de Investigación Científica, Desarrollo Tecnológico e Innovación se incluirán como integrantes a los titulares de las secretarías de la Defensa Nacional, Marina y de Agricultura y Desarrollo Rural, además de los que ya lo integraban.
El documento aprobado fue enviado al Senado para que continúe el proceso legislativo. Señala que la participación de las secretarías citadas busca fortalecer al Consejo General de Investigación Científica, Desarrollo Tecnológico e Innovación.
Sin embargo, la oposición criticó duramente la reforma. La diputada Martha Tagle, de Movimiento Ciudadano (MC), consideró que este dictamen confirma que existe un proyecto transexenal de las Fuerzas Armadas para adquirir mayor presencia en las actividades civiles.
Y es que, entre las principales facultades que la Ley de Ciencia y Tecnología otorga al Consejo, se encuentran la de aprobar y actualizar el Programa Especial de Ciencia , Tecnología e Innovación; establecer en el Programa Especial las políticas nacionales para el avance de la investigación científica, el desarrollo tecnológico y la innovación; y definir los lineamientos programáticos y presupuestales que deberán tomar en cuenta las dependencias y entidades de la Administración Pública Federal para realizar actividades y apoyar la investigación científica, el desarrollo tecnológico y la innovación.
Además, el Consejo emite anualmente un informe general acerca del estado que guarda la ciencia, la tecnología y la innovación en México; aprueba y formula propuestas de políticas y mecanismos de apoyo a la ciencia, la tecnología y la innovación en materia de estímulos fiscales y financieros; y establece un sistema independiente para la evaluación de la eficiencia, resultados e impactos de los principios, programas e instrumentos de apoyo a la investigación científica, el desarrollo tecnológico y la innovación.
Por último, también realiza el seguimiento y evaluación del Programa Especial y del Presupuesto anual destinado a la ciencia, la tecnología y la innovación y demás instrumentos de apoyo a estas actividades. En redes sociales, los usuarios criticaron la reforma y colocaron el dictamen en el #InventarioNacionalDeLoMilitarizado.
La etiqueta es usada por organizaciones civiles y activistas que protestan por la militarización de actividades civiles en el gobierno de López Obrador, administración que le ha entregado un protagonismo inédito a las fuerzas armadas en actividades que van desde el control de las aduanas del país, la construcción del Aeropuerto de Santa Lucía para la Ciudad de México y la administración del Tren Maya hasta su participación en actividades de seguridad pública.
La reforma también adicionó un segundo párrafo al artículo 7 para establecer que el presidente de la República presidirá, al menos, una sesión en el año y designará un representante para que presida las demás. Los titulares de las dependencias mencionadas en la fracción II del artículo 5 podrán, a su vez, nombrar a un representante, quien deberá tener el nivel de subsecretario o equivalente.
Es decir, con esta modificación, López Obrador y sus sucesores podrán nombrar al titular del Ejército o de la Marina como el representante que presida las reuniones del Consejo, poniendo nuevamente en manos de las fuerzas armadas las actividades reservadas para los civiles.
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