El CJNG es el principal sospechoso de los cultivos de coca encontrados en la sierra de Guerrero

A pesar de que la planta es originaria de los Andes Amazónicos y debe de permanecer en un clima húmedo, ésta fue transportada hasta la sierra ubicada a 180 kilómetros al suroeste de la ciudad costera de Acapulco

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EFE/David Guzmán
EFE/David Guzmán

El lunes 8 de febrero, soldados del Ejército descubrieron en la sierra de Guerrero un extenso plantío de hoja de coca de más de 20 mil metros cuadrados, así como un narcolaboratorio para procesar el alcaloide.

Aunque se trata del segundo hallazgo del cultivo de esta planta en el país, el descubrimiento sugiere un cambio profundo en la producción de drogas estimulantes a nivel mundial. Los carteles mexicanos podrían estar asumiendo el control de la producción y rutas de trasiego de cocaína hacia los Estados Unidos, para así desplazar definitivamente a las organizaciones sudamericanas.

Fuentes federales consultadas por La Jornada señalaron al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) como la organización criminal responsable de experimentar con el cultivo de coca en México, algo que antes no sucedía fuera de países andinos como Colombia, Perú, Bolivia y Ecuador.

Foto de archivo de una
Foto de archivo de una planta de hoja de coca que se cultiva en los yungas y el chapare de Bolivia. EFE/Martin Alipaz/Archivo

Esta nueva estrategia del cártel de las cuatro letras, según las fuentes, consistiría en “producir drogas sintéticas en puntos mucho más cercanos a los mercados en los que operan, y con ello reducir los trasiegos de químicos considerados esenciales y la posibilidad de su decomiso”, señalaron los funcionarios consultados por el medio.

Información recabada por el gabinete de seguridad nacional refiere que la primera vez que las autoridades mexicanas localizaron un cultivo de plantas de hojas de coca ocurrió en septiembre de 2014 en el pueblo de Tuxtla Chico, en Chiapas. Militares y agentes federales localizaron 1,639 plantas, luego de la detención de tres personas en posesión de 180 kilos de hoja.

Antonio Mazzitelli, representante de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, consideró aquel hallazgo como “preocupante”.

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MEX5544. ATOYAC DE ÀLVAREZ (MÉXICO), 23/02/2021.- Vista general del campamento y laboratorio clandestino que el Ejército Mexicano destruyó junto a cuatro hectáreas de plantas de coca, hoy en el municipio de Atoyac de Álvarez, en la sierra del estado de Guerrero (México). EFE/David Guzmán

El segundo plantío fue descubierto en el municipio de Atoyac de Álvarez, Guerrero, por elementos del Ejército que realizaban un reconocimiento terrestre entre el río Santiago y El Porvenir. Se trataba de un laboratorio rústico y plantíos de coca con una superficie de más de 20 mil metros cuadrados (2.04 hectáreas), además de un vivero con aproximadamente 2,000 plantas de coca.

En el interior del laboratorio había dos prensas metálicas, un saco de cal de 20 kilogramos, un tanque de capacidad de 45 kilogramos, cuatro recipientes de vidrio de 2.5 litros con etiqueta de “ácido clorhídrico”, entre otros materiales para el proceso de la planta. Cada kilo de cocaína base requiere de 100 kilos de hoja, y un kilogramo de cocaína procesada puede cortarse hasta cinco veces para considerarse de calidad regular, indicaron las fuentes a La Jornada.

A pesar de que la planta es originaria de los Andes Amazónicos y debe de permanecer en un clima húmedo, ésta fue transportada hasta la sierra ubicada a 180 kilómetros al suroeste de la ciudad costera de Acapulco.

MEX5544. ATOYAC DE ÀLVAREZ (MÉXICO),
MEX5544. ATOYAC DE ÀLVAREZ (MÉXICO), 23/02/2021.- Un miembro del Ejército muestra el campamento y laboratorio clandestino que el Ejército Mexicano destruyó junto a cuatro hectáreas de plantas de coca, hoy en el municipio de Atoyac de Álvarez, en la sierra del estado de Guerrero (México). EFE/David Guzmán

Aquí estamos a 900 metros, pero la combinación del clima, el calor y la altura, es el resultado de que la coca haya permitido el cultivo”, confirmó a los medios el teniente coronel Benítez Campoy.

Un kilo de cocaína base se cotiza en territorio colombiano en unos USD 2,000, sin embargo, cuando esta cantidad de droga se localiza en la zona sur de México instituciones internacionales la cotizan con un valor que oscila entre los entre los 2,500 y 14,000 dólares; cada kilo de cocaína se valúa hasta en USD 20 mil en ciudades fronterizas como Tijuana, Ciudad Juárez o Reynosa, según los datos del Centro Internacional de Investigación y Análisis contra Narcotráfico Marítimo.

Mientras el polvo blanco vaya avanzando más hacia el norte, los gastos aumentan pero también la demanda. Un consumidor final en Nueva York va terminar pagando los gastos que requirió sobornar a policías locales y agentes aduanales para que la droga llegara hasta él.

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, advirtió que el gobierno ya tiene conocimiento de los cultivos de cocaína en la sierra del estado e investigarán al respecto.

“Decirles para los que andan mal que ya sabemos que están ahí en Guerrero experimentando con el cultivo de coca y ya estamos investigando sobre esto”, apuntó.

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