El mundo sigue volteando a ver a Joaquín el Chapo Guzmán y su Cártel de Sinaloa cuando piensa en narcotráfico; sin embargo, Estados Unidos cada vez se fija más en Nemesio Oseguera Cervantes, el Mencho, líder del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) quien, según las autoridades de ese país, ha formado la organización criminal más poderosa del planeta.
El CJNG se ha especializado, sobre todo, en el tráfico de opioides, como el fentanilo, que es traficado a los EEUU en forma de píldoras. Para el comercio de éstas sustancias ilícitas, la organización criminal ha tenido que luchar por las plazas de la frontera sur de Estados Unidos.
Reportes de la Administración del Control de Drogas (DEA) revelan que actualmente, la influencia del CJNG se extiende en 20 regiones de la nación norteamericana, Seattle, Santa Rosa, Modesto, Orange Country, San Diego, Los Ángeles, Denver, Chicago, Farview Heigts, New York, Imperial, Kansas City, Texas, Houston, Laredo, Lexington, Roanoke, Memphis, Atlanta, Gulfport y Orlando.
El año pasado, el cártel de las cuatro letras llegó Honolulu, Hawái, mercado olvidado por el Cártel de Sinaloa durante dos años. También se expandió hasta el otro extremo, en el Caribe, con influencias en San Juan, Puerto Rico.
En Estados Unidos —que ocupa una extensa franja de América del Norte— el CJNG ha encontrado un refugio. Documentos de la DEA advierten que el grupo criminal opera con ayuda de pandillas, algunas de ellas han evolucionado a “cárteles domésticos”.
En México, el CJNG tiene presencia en 23 de los 32 estados, con mayor parte de su crecimiento en la zona centro y con ubicaciones estratégicas en la frontera con EEUU. De acuerdo con la DEA, el CJNG también influye en los más concurridos puertos mexicanos, uno de ellos el de Manzanillo, Colima, que utiliza para la distribución de grandes cantidades de drogas.
La rápida expansión del CJNG se caracteriza por la voluntad del grupo de participar en actos violentos enfrentamientos con el gobierno mexicano, fuerzas de seguridad y cárteles rivales.
En mayo de 2015, el Cártel Jalisco derribó un helicóptero con un lanzacohetes, que acabó con la vida de ocho militares y un policía federal. Desde entonces, los choques entre el Gobierno mexicano y la organización del Mencho fueron constantes y muy violentos.
Su líder, Nemesio Oseguera Cervantes, es la persona más buscada por la DEA, y se le acusa de dirigir una empresa criminal de manera continuada desde 2007, de conspirar para importar y distribuir cocaína y metanfetamina en Estados Unidos y usar armas de fuego, entre otros delitos.
Poco después de su aparición los vínculos del CJNG abarcaron entre ocho y 11 entidades, según reportes mexicanos y de la Administración del Control de Drogas. No obstante, actualmente, informes de Lantia, Stratfor y del Congreso norteamericano indican que estaría en prácticamente todo el territorio de México, a excepción de Sinaloa.
SEGUIR LEYENDO: