Un agente de la Patrulla Fronteriza de los Estados Unidos grabó con su celular el desgarrador momento en el que un niño migrante le suplicó llorando por ayuda tras ser abandonado en el desierto de Texas.
Con lágrimas en los ojos, el video muestra al niño caminando hacia el agente de la Patrulla Fronteriza, antes de preguntarle si podía brindarle asistencia porque lo habían dejado “botado” cerca del Río Grande.
—”¿Me puede ayudar?”, imploró el menor al comienzo de la grabación.
—”¿Qué pasó?”, le respondió el agente.
—”Es que yo venía con un grupo de personas y me dejaron botado y no sé dónde están”, le explicó el niño, que no pudo contener las lágrimas.
Según los primeros informes, el incidente ocurrió el pasado 1 de abril, luego de que el agente fronterizo concluyera su turno laboral. Univision informó que el menor, cuya edad y nacionalidad no han sido divulgadas por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP), pasó toda la noche recorriendo la región del Valle del Río Grande después de que ingresara ilegalmente al país.
Según los primeros reportes, el menor viajaba —sin sus padres— con un grupo de 80 personas y llevaba cuatro horas caminando solo.
La jefa del sector del Paso, Gloria Chávez, dijo a la cadena que los padres “deben pensar en el bienestar de sus hijos” cada vez que los envíen solos a cruzar la peligrosa frontera entre México y Estados Unidos.
—”No sabes dónde están, ¿te dejaron solo?”, continuó el oficial que grabó al menor.
—”Me dejaron botado, solo”, le contestó el niño.
—”¿No vienes con mami o con papi o con alguien?”, le preguntó el agente.
—”¡Nadie, yo venía en un grupo… y al final me dejaron botado y vine aquí a pedir auxilio!”, exclamó el pequeño.
—”Yo vengo, porque si no, ¿a dónde me voy a ir?, tal vez me pueden robar, secuestrar o algo y tengo miedo”
La grabación fue tomada solo dos días después de que la Patrulla Fronteriza de EEUU publicara un video de vigilancia que mostraba a traficantes de personas arrojando a dos niñas de Ecuador desde lo alto de un muro fronterizo en el desierto de Nuevo México.
Cámaras de vigilancia captaron las imágenes en las que se ve a las dos niñas cayendo desde la parte superior del muro y a los dos traficantes que las lanzaron huyendo del lugar, después de que estas se encontraran ya en la parte estadounidense.
Las hermanas, de tres y cinco años, fueron rescatadas por agentes el martes y trasladadas a la estación de la Patrulla Fronteriza de Santa Teresa para una evaluación médica. Ambas se encuentran en buen estado de salud, aseguró Gloria Chávez.
Por su parte, el secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Alejandro Mayorkas, ha expresado su preocupación por “la forma inhumana en que los traficantes abusan de los niños mientras se benefician de la desesperación de los padres”, actos que ha calificado como “criminales”.
De acuerdo con datos preliminares de la agencia Reuters, las autoridades estadounidenses detuvieron a más de 171,000 migrantes en la frontera con México en marzo.
El mayor total mensual en dos décadas y la más reciente señal del creciente reto humanitario al que se enfrenta Joe Biden. El total incluye unos 19,000 niños migrantes no acompañados y 53,000 miembros de familias que viajan juntos, según las cifras preliminares. Los adultos solteros representan aproximadamente 99,000.
SEGUIR LEYENDO: