Fue en 1983 cuando el músico y escritor Armando Vega Gil formó, junto con Sergio Arau y Francisco Barrios “El Mastuerzo”, la emblemática banda de rock mexicano Botellita de Jerez, que hasta la fecha es un ícono de ese género en nuestro país.
Armando Vega-Gil nació el 6 de julio de 1955 en la Ciudad de México, y fue escritor, músico, compositor, poeta, guionista, antropólogo y fundador de Botellita de Jerez. Estudió antropología social en la Escuela Nacional de Antropología e Historia e iniciación musical en el Instituto Nacional de Bellas Artes.
Con Botellita de Jerez, en donde se encargaba de tocar el bajo aparte de cantar, grabó ocho discos, y tuvo grandes éxitos, como la canción “Alármala de tos”.
También fue becario de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México para la difusión de obra literaria en el programa Artes por Todas Partes en 2001 y 2004. Obtuvo el Premio Nacional de Cuento Benemérito de América 2001 convocado por la UABJO, obtuvo el Premio Internacional Goliardos de Ficción, Terror y Fantasía 2001; el Premio Nacional de Poesía de los XIX Juegos Florales Universitarios 2001 convocados por la Universidad Autónoma de Campeche, y fue el primer lugar en el Concurso de Guión para Cortometraje en el VI Festival Internacional Expresión en Corto 2003, Guanajuato. Obtuvo el Premio Nacional de Cuento San Luis Potosí 2006 por Cuenta regresiva, y el Premio Alejandro Galindo a guión escrito para largometraje otorgado por la SOGEM, SEXCUEC y el FIDECINE, 2008.
Entre sus libros se encuentran el Diario Íntimo de un Guacarróquer (2013), Picnic en la fosa común (2009), La ventana y el umbral (1995) y Renata y la fábrica de juguetes (2015).
Vega Gil decidió terminar con su vida un primero de abril del 2019, luego de que, por medio de una denuncia anónima, se le acusara de abuso sexual en contra de una menor de edad.
Fue por medio del Twitter del movimiento #MeTooMúsicosMexicanos, que se publicó la acusación, en donde se hizo público el testimonio de una mujer que dijo haber conocido a Vega-Gil cuando ella tenía 13 años y él, 50.
Según su relato, tras conocerse en el Tianguis del Chopo, la entonces adolescente tuvo oportunidad de visitar a Vega-Gil un par de veces en su casa, siempre acompañada por amigas.
Pero, recordó, en una de aquellas visitas Vega-Gil le tomó fotos que la hicieron sentir incómoda y después le hizo comentarios con implicaciones sexuales. Finalmente, la adolescente cortó el contacto con el músico.
Dichas acusaciones fueron negadas en su totalidad por el músico, quien por medio de una carta posteada en su cuenta de Twitter, la madrugada de aquél primero de abril de 2019, dijo que afirmaba de manera categórica, que la acusación era falsa, y acompañada de la carta, se leía la frase “No se culpe a nadie de mi muerte: es un suicidio, una decisión voluntaria, consciente, libre y personal”.
“Una chica me acusa de abuso y acoso. Ella narra que el episodio ocurrió cuando tenía 13 años, lo cual hace que esto se vuelva grave, muy grave. Bien, lo afirmo categóricamente, dicha acusación es falsa”, mencionó Vega Gil en la carta.
Dijo ser una persona pública y recibir, de manera constante, a gente en su casa, muchos de ellos menores de edad, por entrevistas, talleres, o simplemente charlas. Recalcó que en su carrera se dedicaba a escribir libros y componer canciones para niños, además de ser padre de familia.
Dijo en su carta estar en contra del maltrato de los niños, su explotación y abuso físico, y buscar alegrar sus vidas con las canciones y libros que escribía y cantaba para ellos. Mencionó que quien lo acusaba estaba en todo su derecho de hacerlo, pero que dicha acusación ponía en entredicho su carrera, insistiendo que no había ocurrido el abuso de su parte.
Aseguró que perdería sus trabajos, pues todos ellos, mencionó, se construían sobre su credibilidad pública.
“Mi vida está detenida, no hay salida. Sé que en redes no tengo manera de abogar por mí, cualquier cosa que diga será usada en mi contra (...)En esta perspectiva, lo que menos deseo es que mi hijo se vea afectado por la falsa acusación que se hace”, dijo Vega Gil, antes de anunciar que había decidido quitarse la vida.
AL final de su texto, que hasta la fecha sigue posteado en su cuenta de Twitter, se lee “No se culpe, pues, a nadie de mi muerte: esta- el suicidio– es una decisión consciente, voluntaria, libre y personal. Hasta pronto”.
Posterior a esto, el cuerpo del músico fue encontrado colgado de un árbol con un alambre, afuera de su domicilio, en la calle La Morena, en la colonia Narvarte.
Poco después, las redes sociales de la banda de la que fue fundador Vega Gil, confirmó el deceso.
Escritores, músicos, amigos, y figuras de la cultura en México, lamentaron la muerte del músico. Ese día, también se anunció que Botellita de Jerez no seguiría.
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