Durante la noche del domingo abordó la unidad 6363 de la línea de autobuses Omex VIP en Saltillo, en la entidad federativa de Coahuila. Él era Chano. No quería seguir esperando: quería arribar temprano a Toluca, en el Estado de México, para ver a su familia, a su esposa, y a sus hijos.
Familiares de la víctima contaron a Excélsior que hace solamente 20 días los había visitado y les había prometido regresar muy pronto. Él trabajaba, desde hace “varios años”, en Saltillo como electricista para así mantener a su esposa y a sus cuatro hijos.
“Sí venía cada 15 días, cada mes, dependiendo de cómo se le facilitara de parte de su trabajo. Él trabajaba allá en Saltillo, trabajó siempre en la electricidad. De hecho cada vez que venía iba a ver mi madrecita que, pues si ya está grandecita a sus 94 años, la iba a ver con todo y su familia y estaba un rato ahí con ella”, contó Justino Villanueva, hermano de la víctima, a Dalila Ramírez para Excélsior.
También lamentaron que la empresa camionera haya valuado la vida de Chano en 450,000 pesos, que él era un “jefe de familia”, y que las autoridades estatales no se han acercado a su familia.
“Nadie de las autoridades se nos ha acercado para apoyarnos o más que nada qué se puede hacer en el caso con los responsables, si hay o no responsables. La cantidad que nos ofrezcan de todas maneras ya la pérdida del hermano ya no lo devuelve la vida. Que sean justos en el apoyo que nos van a brindar”, dijo.
Describió a Chano como un hombre bromista, generoso, alegre, y que dedicaba su tiempo libre a su familia. También contó que nunca tomaba un camión para regresar a Toluca, sino que hacía el viaje en una camioneta, con otros compañeros, y usualmente de día.
“Era una persona muy trabajadora, muy responsable, siempre trabajando y preocupado por sus hijos, la prueba está en que a todos los tiene estudiando y por eso trabajaba. Él buscaba la manera de buscar siempre el sustento y era alegre, contento, siempre servicial con su familiar, con todos y teníamos buena relación con todos sus familiares tanto de él como por parte de mi hermana”, reveló Gelacio Domínguez, cuñado de Chano.
Los familiares de la víctima también afirmaron que la indemnización otorgada por la línea de autobuses no será suficiente para solventar los estudios universitarios, de preparatoria, y de secundaria de sus hijos, ni los gastos de su casa, por lo que hicieron un llamado a la empresa y a las autoridades.
“Constantemente él venía, cada vez que venía visitaba a su familia, eso venía, visitaba a su familia, a sus papás, sus hermanos, su esposa y visitaba también la familia de mi papá, sus suegros, siempre, siempre que venía, las visitas que hacía... siempre venía y siempre nos contaba lo que vivía”, señaló.
De acuerdo con el medio, Chano hizo una llamada telefónica a su esposa alrededor de las 21:30 horas: le dijo que llegaría pronto.
En la mañana del domingo un autobús de pasajeros perdió el control, volcándose dentro de la cuneta a un costado de la carretera Aculco-Acambay, a la altura del kilómetro 87. Se sabe que siete personas fueron reportadas como muertas en el lugar y al menos una tuvo que ser trasladada por un helicóptero del Grupo de Rescate Aéreo Relámpagos del Estado de México hacia el hospital Dr. Nicolás San Juan en Toluca.
Según el periódico nacional Milenio, en un reporte del Servicio de Urgencias del Estado de México (SUEM) se esclarece que el total de personas involucradas en el siniestro fueron 13: dos conductores y 11 pasajeros. Versiones iniciales del accidente, que fueron descartadas, hablaban de hasta 35 personas heridas.
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