Estudiantes organizados de la Universidad de Arte y Diseño (FAD) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) tomaron el plantel de manera simbólica, pues las clases actualmente son en línea, como parte de una protesta en contra de la falta de pagos a maestros y otras situaciones que enfrenta la comunidad estudiantil.
A través de un comunicado las autoridades de la FAD informaron que la madrugada del 21 de marzo fueron tomadas las instalaciones del campus ubicado en Xochimilco, Ciudad de México. Detallaron, además, que fueron siete personas encapuchadas las responsables de la toma.
De acuerdo con su comunicado, los responsables del paro rompieron las cámaras de seguridad, el edificio de cómputo, robaron mobiliario y equipo del plantel, en un acto que “afecta significativamente el patrimonio universitario, fundamental para la continuidad de las actividades académicas”.
“Las autoridades de esta entidad y de la UNAM han estado presentes, abiertos al diálogo y a encontrar soluciones que beneficien a nuestra comunidad; la UNAM como institución académica concebida y diseñada para cumplir con sus tareas sustantivas de docencia, investigación y difusión de la cultura, refrenda su convicción de continuar con las medidas y acciones que permitan avanzar siempre mediante el diálogo y con base en la legislación universitaria”, aclararon.
Sin embargo, estas conjeturas fueron desmentidas por los Estudiantes Organizados FAD a través de sus redes sociales, en la que compartieron recorrido en video por diferentes partes del plantel para constatar que no se dañaron edificios, mobiliario o automóviles al interior del recinto; por ello etiquetaron como un acto incriminatorio.
Además, compartieron el Pliego Petitorio que fue entregado a las autoridades universitarias, y en el que lanzan diversas exigencias en beneficio de la comunidad estudiantil, de acuerdo con su comunicado, el cuál inicia de la siguiente manera:
“(...) hacemos hincapié en la situación que se ha dado a conocer en días pasados, acerca de la problemática sobre el pago a docentes dentro de la universidad. Nos solidarizamos con toda la comunidad universitaria principalmente con los docentes que están pasando por esta precaria situación, más aun durante la pandemia”,
Enseguida, enumeran una serie de peticiones para que las autoridades de su Facultad atiendan con toda prontitud o en su caso, se unan al diálogo para encontrar solución a las problemáticas señaladas:
La primera, es una exigencia para que las autoridades, así como los docentes de la institución no tomen represalias “contra cualquier individuo que participe en las acciones tomadas dentro de la Facultad”
En segunda instancia, pidieron que “el protocolo de género, así como las denuncias por acoso y/o abuso deben ser revisados y actualizados para dar una respuesta eficaz y solida a las personas que hayan sufrido alguna problemática de esta índole”.
En el tercer puesto destacaron que “el protocolo que se realiza al momento de pedir prestado un equipo de computo tiene que ser conciso y estar a disponibilidad de todo el cuerpo estudiantil, pensando principalmente que gran parte de los estudiantes no tienen la posibilidad de adquirir equipos para trabajar en las clases en línea”.
Además, exigieron la “mejora y planeación de los horarios de atención hacia los estudiantes, así como el desarrollo y supervisión en cuanto a la atención psicológica que se provee”
En quinto lugar, solicitaron que “la implementación de nuevos programas que ayuden al estudiantado a validar su servicio social, puesto que actualmente es casi imposible hacerlo fuera de las opciones que la Facultad ofrece”.
Luego, se van al tema económico pidiendo “el esclarecimiento ante los gastos excesivos y el posible desvío de recursos que se han registrado desde administraciones pasadas hasta la actual”.
Por último, insistieron en “la capacitación obligatoria hacia los profesores, por parte de la misma universidad, puesto que muchos de ellos no tienen el tiempo y o los recursos”.
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