A pesar de que oficialmente, Carlos Romero Deschamps, había “renunciado” como líder del poderoso Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) desde el 16 de octubre de 2019, seguía siendo trabajador activo de la empresa productiva del Estado, por lo que seguía cobrando y disfrutando de beneficios laborales como vacaciones, bajo el argumento de que en 27 años que estuvo al frente del Sindicato, Romero de Deschamps no las había tomado..
Tras estas revelaciones, este martes 16 de marzo, el presidente Andrés Manuel López Obrador informó que Romero Deschamps, presentó su renuncia y, a partir de este mismo día, deja de ser trabajador activo de Pemex.
“Eso lo hace por voluntad propia y también por un exhorto que le hicimos de que, también, aunque fuese legal, que así estuviese acordado en las condiciones laborales, considerábamos que era inmoral”, dijo en su tradicional conferencia mañanera en Palacio Nacional.
De acuerdo con una investigación realizada por el portal SinEmbargo, entre enero y diciembre del año pasado, Romero Deschamps cobró un millón 208 mil 843 pesos netos como jefe de departamento u homólogo en la Refinería Miguel Hidalgo, de acuerdo con la última declaración patrimonial que presentó en enero de 2021 ante la Secretaría de la Función Pública (SFP).
Según la plataforma Nómina Transparente de la SFP, el “sueldo neto estimado” de Romero Deschamps ascendía a 28,636.50 pesos mensuales, pero al sumar prestaciones, bonos, aguinaldos y otras prestaciones, así como beneficios que percibió por su cargo, su salario mensual proporcional ascendió a los 100,737 pesos.
Además de la “remuneración anual neta por cargo público”, durante el 2020 el otrora poderoso líder sindical obtuvo 162,018 pesos por actividades financieras correspondientes a rendimientos o ganancias obtenidas a través de fondos de inversión, así como 210,000 pesos netos “por enajenación de bienes”, que corresponden a la venta de un vehículo particular.
Romero Deschamps ha sido señalado en diversas ocasiones ser responsable de actos de corrupción, en los últimos 20 años instituciones como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, la Alianza Nacional Democrática de Trabajadores Petroleros, la Gran Alianza Nacional Petrolera, la Unión Nacional para el Desarrollo Social de Trabajadores de la Industria Petrolera y el movimiento Petroleros Activos en Evolución por un México Nuevo, han presentado denuncias ante la Procuraduría General de la República , su Unidad de Inteligencia Financiera e incluso en la Subprocuraduría Especializada en Investigaciones de Delincuencia Organizada. Nunca prosperaron.
¿Quién es Carlos Romero Deschamps?
Originario de Tampico, Tamaulipas y de profesión Contador, Carlos Romero Deschamps tiene actualmente 77 años de edad.
Ha sido miembro activo del Partido Revolucionario Institucional (PRI) desde 1961, donde inició su carrera como coordinador de campañas en el estado de Tamaulipas.
En 1969 ingresó a Petróleos Mexicanos (Pemex) y dos años después comenzó sus actividades dentro del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM).
Luego de haber escalado posiciones dentro del sindicato, Romero Deschamps llegó a la dirigencia del STPRM tras la destitución de Joaquín Hernández Galicia “La Quina”, en el llamado “Quinazo”.
Hasta ese momento, “La Quina” había sido el poderoso líder del sindicato petrolero durante 30 años, tiempo en el que alcanzó poder y fortuna bajo el amparo de los gobiernos del PRI.
Pero durante las elecciones presidenciales de 1988, Hernández Galicia apoyó la candidatura de Cuauhtémoc Cárdenas, criticó a Carlos Salinas de Gortari y amagó con una huelga si el presidente intentaba privatizar a Pemex.
Fue entonces que, a principios de 1989, ya con Carlos Salinas como presidente, “La Quina” fue acusado de homicidio y acopio de armas, lo que le valió permanecer casi 10 años en prisión.
De esta manera, Carlos Romero Deschamps llegó a la dirigencia del Sindicato. A la par, fue tres veces Diputado y dos veces Senador de la República.
En el año 2000, Romero Deschamps estuvo involucrado en el caso Pemexgate, en el cual se realizó el desvío de al menos 500 millones de pesos del fondo del sindicato de Pemex a la campaña presidencial del priista Francisco Labastida Ochoa.
Y aunque en el 2003, la entonces Procuraduría General de la República inició un proceso judicial por el delito de peculado electoral, el proceso fue suspendido en 2006 por falta de pruebas y en el 2011 fue dado por finalizado de manera inapelable.
Durante la administración del presidente Enrique Peña Nieto, Romero Deschamps apoyó de manera incondicional la reforma energética, la cual fue concretada en el 2013 y con la que Pemex se abrió al capital privado mediante un cambio constitucional.
Un líder sindical con vida de millonario
A lo largo de 30 años como dirigente sindical, Carlos Romero Deschamps acumuló numerosas riquezas y acusaciones en su contra por delitos que van desde delincuencia organizada, lavado de dinero, evasión de impuestos y enriquecimientos ilícito por 150 millones de dólares.
Hasta el 219, el salario del dirigente era un misterio, pero el portal Nómina Transparente dio a conocer que el sueldo del líder petrolero ascendí a 17 mil 027 pesos netos; sin embargo, el sitio desglosaba otro pago por la misma cantidad, es decir, por dos cargos diferentes Romero Deschamps ganaba 34 mil pesos mensuales.
La nómina causó polémica, pues contrasta con los escándalos de excesos y el estilo de vida de Romero Deschamps.
Hace unos años se supo que gustaba de relojes de lujo de la marca Aude Piquet, valuados hasta en 7 millones de pesos, además de contar con numerosos inmuebles como un departamento en Cancún valorado en 18.7 millones de pesos, propiedades en The Bath Club en Miami valuados en más de 110.8 millones, así como una mansión en la bahía de Acapulco valuada en 6.4 millones de dólares.
Esta última propiedad de al menos mil metros cuadrados, fue derribada por Romero Deschamps para rehacerla a su gusto. La casa contaba con terraza, bar, estacionamiento, cancha de tenis, 11 recámaras, un comedor y un antecomedor en una arboleda.
Poco después, el dirigente aceptó visitar de forma frecuente la mansión de Acapulco, pero negó que el inmueble fuera de su propiedad. “Si bien es cierto que he acudido a la casa en diversas ocasiones, incluso en compañía de otras personas, pero esto ha sido a invitación del abogado Juan Ramón Collado Mocello (actualmente preso en el Reclusorio Norte de la Ciudad de México acusado de lavado de dinero y delincuencia organizada) quien es propietario del citado inmueble”, reviró.
La vida de lujos y excentricidades también ha sido mostrada en redes sociales por sus hijos Paulina y José Carlos.
Paulina levantó polémica luego de que compartió en sus redes sociales fotos de sus viajes, renta de aviones privados, habitaciones de lujo, y bolsas de diseñador con valor de hasta 800 mil pesos.
En 2013, su hijo José Carlos apareció en Mónaco a bordo de un auto Enzo Ferrari edición limitada y en color dorado, valorado en ese entonces en dos millones de dólares. Las imágenes causaron gran indignación, pero sólo quedó en eso.
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