La Catedral Metropolitana de la Ciudad de México, la sede de la Arquidiócesis Primada de México y uno de los templos católicos más importantes y representativos del país, no tiene los recursos necesarios para alimentar a los sacerdotes que ahí desempeñan sus actividades ni para cubrir el salario de sus 21 empleados.
La crisis económica provocada por la pandemia de Covid-19 ha tenido consecuencias terribles para prácticamente todos los sectores de la población nacional, incluyendo a la Iglesia Católica. La Arquidiócesis informó que unos meses atrás tuvo que reducir su nómina de trabajadores, puesto que no contaban con suficiente dinero para cubrir sus gastos.
Cabe destacar que la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México es Patrimonio cultural de la Humanidad por la Unesco en 1987 y fue dañada durante el sismo de 2017.
Para poder rescatar a la Catedral Metropolitana de la capital, algunas de las instituciones de educación superior privadas más reconocidas del país lanzaron una iniciativa llamada “La Catedral es de Todos”. En la mencionada iniciativa colaboran la Universidad Anáhuac, Universidad La Salle y Universidad Panamericana y busca recaudar fondos, a partir de donativos, para poder el mantenimiento a la catedral y pagar los sueldos de sus empleados.
El coordinador de esta campaña, Germán Campos Valle, quien también se desempeña como director de desarrollo institucional en la Universidad Anáhuac, invitó a todo el que lo desea a realizar aportaciones para poder contribuir con esta importante causa. Esto se puede hacer desde cualquier computadora o dispositivo con internet a través de esta página web.
Campos Valle comentó en conferencia que se transmitió vía zoom que el objetivo de la campaña es recaudar 600 mil pesos mensuales a partir de aportaciones individuales o periódicas de personas preocupadas por la situación de la Catedral, la Arquidiócesis y sus feligreses. Este presupuesto es el necesario para cubrir los costos de mantenimiento, restauración y pago de la nómina de empleados.
El rector de la Catedral, Ricardo Valenzuela Pérez, informó -según Excélsior, que “este momento no se puede pagar la alimentación de los sacerdotes, ha sido gente que nos trae la despensa y ha habido todo un trabajo muy bonito del pueblo de Dios para que podamos, desde marzo estar comiendo gracias a la limosna, gracias al apoyo de la gente”.
El clérigo también subrayó que ha habido un cierto abandono de parte del gobierno federal y que conflictos relacionados con el Fondo Nacional de Desastres (FONDEN), han evitado que lleguen los recursos necesarios para la restauración de los daños que provocó el temblor de 2017.
Formalmente, el mencionado templo se llama Catedral de la Asunción de María de México, se encuentra en el lado norte del Zócalo capitalino. Tiene una altura de 67 metros. Fue construida según los planos del arquitecto español Claudio Arciniega poco después de la conquista española de la ciudad de Tenochtitlán. La obra comenzó en 1573, el interior fue 1667 y en el exterior en 1813, aproximadamente tres años después de que comenzara la Guerra de la Independencia de nuestro país.
Su edificación muestra una mezcla de algunos de los diferentes estilos arquitectónicos que estuvieron de moda durante los 250 que duró la construcción. Algunos de estos son: gótico churrigueresco y barroco. Muchos de los más renombrados y reconocidos arquitectos, artistas plásticos y pintores del periodo virreinal trabajaron en algún momento en esta importante catedral.
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