La madrugada de este miércoles se dio a conocer la resolución del Juzgado Segundo de Distrito en Quintana Roo, por medio de la cual se dictó el auto de formal prisión contra Mario Marín, exgobernador de Puebla, por el delito de tortura en agravio de la periodista y activista Lydia Cacho.
“La justicia no será plena hasta que el exgobernador sea condenado y, junto a él, todos los autores intelectuales que permanecen prófugos. Además debe ser garantizada la reparación integral de los daños para Lyidia Cacho y su familia”, escribió la organización internacional Articulo 19, quien confirmó la noticia a través de redes sociales.
El pasado 4 de febrero, durante una audiencia, el priista reconoció formalmente la acusación que presentó en su contra la Fiscalía General de la República (FGR) como presunto responsable del delito de tortura en agravio de la periodista Lydia Cacho.
Tiempo después, Marín Torres se reservó su derecho a declarar y su defensa, Gerardo Vázquez Morales, solicitó que se ampliara el término constitucional de 72 a 144 horas para que se determinara su situación jurídica.
El ex gobernador de Puebla Mario Marín, conocido como el “góber precioso” por la tortura que supuestamente orquestó en contra de la periodista Lydia Cacho, fue detenido en Acapulco el pasado 3 de febrero y trasladado al Cereso de Cancún, Quintana Roo, donde fue ingresado.
Marín fue trasladado en avión desde el estado de Guerrero y su vuelo llegó a territorio quintanarroense a las 0:20 horas.
La orden de aprehensión que libraron en su contra fue emitida por el primer Tribuna Unitario con residencia en Quintana Roo. Además, el ex gobernador de Puebla también cuenta con una ficha roja de la La Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol, por sus siglas en inglés).
Mario Marín gobernó el estado de Puebla entre 2005 y 2011, pero también estuvo en la presidencia municipal de la capital de 1999 al 2000. Fue secretario del edil de puebla entre 1987 y 1990, Guillermo Pacheco Pulido, y fue secretario de Manuel Bartlett Díaz de 1993 a 1999.
El delito que se le imputa en 2015 a Marín es tortura en contra de la periodista Lydia Cacho, quien publicó un libro titulado “Los demonios del Edén”, una investigación que acusaba al Marín y al empresario Kamel Nacif de promover una red de pederastia.
Tras la publicación de este, la periodista fue acusada de difamación y calumnias y el 16 de diciembre del siguiente año, ella fue detenida en Quintana Roo.
Cacho fue trasladada a Puebla vía terrestre, pero en el trayecto de más de 1,500 kilómetros, fue torturada psicológicamente por los oficiales, quienes amenazaron con abusar de sexualmente de ella.
En su testimonio, la periodista mencionó que cuando llegaron a Puebla, el trámite de su propuesta fue lento y tortuoso. La encerraron en un “calabozo inmundo” y le tomaron fotos desnuda al lado de un cuarto lleno de policías judiciales con una mampara transparente de por medio.
El 17 de diciembre salió libre a las 15:00 horas, luego de pagar una fianza de 70,000 pesos en efectivo.
Lydia Cacho se pronunció sobre la detención en su cuenta de Twitter. Además, adjuntó una imagen de una camioneta blanca, en donde presuntamente se encontraría Marín.
“Llevo 14 años buscando justicia por haber sido torturada por este cómplice de redes de Pornografía Infantil Vamos por todos”, aseveró en el mismo mensaje.
MÁS SOBRE EL TEMA