En el estado de Nuevo León, un grupo de personas que perdieron sus ahorros en el extinto Banco Famsa increparon al que fuera el presidente del Consejo de Administración de dicha entidad financiera, Humberto Garza Valdez, mientras este se encontraba celebrando la boda de su hijo.
Videos que circulan en redes sociales muestran a los inconformes afuera de la Basílica del Roble, en el municipio de Monterrey, mientras Garza Valdez pasa caminando junto a otro asistentes al evento. Los manifestantes, a gritos, reclamaban que les fueran devueltos sus ahorros, y específicamente a Humberto Garza le exigían que se hiciera responsable de la deuda que Banco Famsa tiene pendiente con los que fueron sus ahorradores.
“Banco ahorro Famsa nos robó”, “Ladrones”, son algunos de los reclamos que se escuchan en las grabaciones. Incluso una mujer se dirigió a Humberto Garza diciendo: “¡Regrésanos nuestro dinero, Humberto. Regrésanos nuestro dinero!, ¿no te da vergüenza?, ¿no te da vergüenza, Humberto?, mi abuelita murió, Humberto, ¿por qué te pones así? ¿por qué no nos das la cara? ¡Ladrón!”.
De acuerdo con medios locales, la protesta inició durante la ceremonia religiosa ya mencionada y se intensificó cuando los invitados al evento salían de la iglesia para dirigirse a la recepción.
El pasado 26 de junio se dio a conocer que Grupo Famsa se había declarado en bancarrota en Estados Unidos, después de que sus acreedores aprobaron un plan para reestructurar unos 60 millones de dólares en bonos.
Y cuatro días después, la Junta de Gobierno de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) anunció que la entidad bancaria comenzaba un proceso de liquidación, luego de que las autoridades financieras decidieron la revocación de su licencia como institución de banca múltiple por gestiones inapropiadas.
A través de un comunicado, señalaron que detectaron que la banca había realizado operaciones y créditos por encima de los límites regulatorios, así como registros indebidos en dichas operaciones, incumpliendo con las normativas de la Ley.
Dicha Ley establece un mecanismo de protección financiera que promueve la transparencia, la certeza y permite salvaguardar los intereses de los ahorradores y estabilidad financiera.
Tales incumplimientos, detallaban, fueron detectados en actividades que datan desde el 2016. Como resultado, dichos incumplimientos y deficiencias fueron presentadas antes de que ocurriera la crisis sanitaria por el COVID-19.
Detallaron que este es un caso particular de liquidación y no representa ningún tipo de riesgo a la estabilidad financiera de México.
“Al día de hoy, el sistema bancario cuenta con los niveles de capitalización y solvencia suficientes que dan seguridad al ahorro de los depositantes mexicanos”, detallaron.
No obstante, a mediados del año pasado, el Instituto para la Protección del Ahorro Bancario (IPAB) aseguró que los 580,774 clientes del banco que tenían saldo activo en sus cuentas, no perderían sus ahorros, ya que estaban protegidos por ese organismo.
La IPAB detallaba entonces, que los ahorros no son tomados de los del presupuesto del Gobierno de México, y que para reintegrarlos tampoco se distribuirán recursos de origen fiscal para el proceso de liquidación.
“El pago del seguro de depósitos se realiza con cargo al Fondo de Protección al Ahorro Bancario, que recibe mensualmente cuotas de todas instituciones de banca múltiple,” detallaba en ese momento la dependencia.
Pero unos tres meses después, en octubre del año pasado, decenas de cuentahabientes defraudados por el Banco FAMSA protestaban en la Ciudad de México exigiendo a los legisladores interceder para que pudieran acceder a sus ahorros lo antes posible, mediante una ley a la reforma de instituciones de crédito.
Cabe mencionar que con la ley vigente, recibirían los más de 6,000 millones de pesos que les debe la institución de la familia Garza Valdez (declarada en quiebra a finales de junio pasado debido a irregularidades en la operación) después de quienes tienen crédito en garantía, de los adeudos laborales y fiscales del banco.
“El banco de los Garza Valdez se está burlando de nosotros, porque en el orden de prelación para liquidar sus adeudos, nos tienen en la cola y para cuando terminen de liquidar sus activos, no quedará un centavo para regresarnos nuestros ahorros”, declaraba durante la manifestación el cuentahabiente Jesús Ramírez.
Además, el llamado Comité de Defraudados de FAMSA, exigía en esa ocasión la devolución íntegra de su dinero, pues en muchos de los casos, los recursos son de adultos mayores que ahí recibían sus pensiones y que con el quiebre de la institución bancarIa, perdieron los ahorros de toda su vida.
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