Los procesos legales de Damaso López Serrano, el “MiniLic”, e Ismael Zambada Imperial, el “Mayito Gordo”, se mantienen con retrasos y prórrogas por la complejidad de continuarlos durante la pandemia por coronavirus en México, pero en realidad sus juicios llevarían más de un año estancados.
En el caso del “MiniLic”, informó Río Doce, la audiencia preliminar se pospuso nuevamente del 21 de enero al próximo 11 de marzo. Esta sería la décima vez que se tiene una acción de este tipo desde que en marzo de 2018 acusó a más 100 personas de ser presuntos integrantes del Cártel de Sinaloa.
Así comenzaron a redactarse oficios que en años venideros generaron el alargamiento del juicio. Esto ocurrió apenas ocho meses después de haber sido detenido. Damaso López Serrano se entregó sin resistencia el 27 de julio del 2017 en el puesto fronterizo de Calexico, y once días después se dijo inocente de la introducción de drogas y lavado de dinero que le imputaba la Corte de San Diego en los Estados Unidos.
De acuerdo con el medio mexicano, fue hasta 2018 que aceptó su culpabilidad de los cargos y decidió comenzar a delatar a sus compañeros. En total dio 125 nombres, entre los que se contaban Ismael Zambada Sicairos, el “Mayito Flaco” e Ismael Zambada Imperial, el “Mayito Gordo” y los hijos de Joaquín el “Chapo” Guzmán, a quienes se les identifica como “Los Chapitos”.
Casi tres años después el “MiniLic” continúa preso, pero sus declaraciones habrían dado pie al aplazamiento del juicio. Sin embargo, en varias ocasiones habría sido reubicado por presuntas represalias del Cártel de Sinaloa en su conta.
En entrevista con Río Doce, el fiscal especial Ricardo Sánchez señaló que aún “tiene que acabar su proceso (en Estados Unidos), tiene que tener una sentencia, eso es fundamental y eso está establecido en el tratado; lo que hay es un caso de excepción que si él ya está juzgado allá, ya tiene su condena, nos los pueden enviar, lo podemos juzgar y se lo regresamos nuevamente para que siga purgando su pena allá, nos lo mandan nada más para que los juzguemos y se lo regresamos nada más para que termine su pena allá antes de empezar a compurgar su pena acá”.
En el caso del “Mayito Gordo” se especuló que estaba contagiado de COVID-19 por lo que se expuso “la necesidad de prórroga ha superado el mejor interés del público y del acusado, y lo mejor es suspenderlo a tener un juicio rápido”, de acuerdo con el expediente 14-cr-00658 del Departamento de Justicia (USDOJ).
Además, el medio mexicano reveló que el documento argumentaba que de no conceder la prórroga, el Tribunal privaría tanto al Gobierno como a los abogados del tiempo necesario para “una preparación eficaz, a pesar de su debida diligencia, y resultará en la inutilidad de los procedimientos”.
En diciembre pasado se cumplió un año de que el “Mayito Gordo” se declaró inocente de los cargos de los que era acusado por el gobierno estadounidense, como conspirar para importar y distribuir metanfetaminas, cocaína, heroína y marihuana.
Zambada fue detenido en 2014 por la Marina Armada de México en Culiacán, Sinaloa. Sin embargo, en 2019 fue extraditado a los Estados Unidos, donde las dilaciones del proceso se han mantenido constantes, pero hasta ahora no se ha confirmado si dio o no positivo a COVID-19.
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