En los últimos tres meses, el Programa de Seguridad Ciudadana de la Universidad Iberoamericana campus CDMX y Tijuana ha realizado análisis de la información que el presidente López Obrador presenta durante el apartado mensual de seguridad en su conferencia de prensa matutina.
La serie está titulada “Descifrando la conferencia presidencial de seguridad”, en cada edición la publicación busca “contribuir a la conversación pública presentando información a detalle, de forma abierta, con un análisis de contexto y comparativos entre distintas fuentes, señalando lo que se sabe -y lo que no se sabe- de la seguridad para evitar la reproducción simplista de la narrativa oficial”.
En la publicación de enero 2021, la plataforma recuperó las cifras de la violencia vinculada a enfrentamientos militares en el estado de Tamaulipas, donde ocurren más de la mitad de los incidentes de uso de fuerza letal por parte del ejército.
El análisis encontró que la letalidad del Ejército (definida como “número de supuestos agresores fallecidos por cada herido en incidentes de fuerza letal con involucramiento de la Sedena”) en la entidad “se ha disparado a partir de 2017, incluso superando la cifra registrada en 2012 y por los datos obtenidos hasta el momento, 2020 será el año más letal registrado”.
En Tamaulipas, este incremento significa que, cada vez que las fuerzas armadas usan la fuerza en la entidad, hay más muertos y menos heridos. En 2019, los elementos castrenses detuvieron a 21 personas, hirieron a cinco y mataron a 102. En 2017 fueron 45, 19 y 81, respectivamente.
El análisis recupera un testimonio del General Luis Cresencio Sandoval, secretario de la Defensa Nacional en el que aseguró que “la delincuencia es más agresiva hacia las instituciones de seguridad” en Tamaulipas, particularmente en el municipio de Reynosa.
Tamaulipas es una de las entidades más violentas en el combate al narcotráfico. Como estado fronterizo es “un punto importante para el flujo de bienes ilícitos y la entrada de armas al territorio mexicano, además de extorsiones y secuestros de migrantes. Existe, como en otras entidades, un conflicto violento entre los grupos de delincuencia organizada”.
Sin embargo, argumenta el PSC Ibero, no es el único estado que experimenta confrontaciones entre grupos armados y el gobierno. La cuarta región militar, que incluye Nuevo León, San Luis Potosí y Tamaulipas, tiene en promedio una relación de 2 a 1 en incidentes del uso de la fuerza letal por cada mil soldados contra homicidios por cada 100 mil habitantes. En todas las demás regiones, la proporción está, al menos, invertida, o más distribuida.
El análisis identifica dos causales de estos incidentes, la concentración de agentes de seguridad y grupos delictivos y el comportamiento de ambos. Explican que, “aunque es posible que los grupos delictivos en Tamaulipas sean más violentos hacia las autoridades que en otros estados”, como dice el secretario de la Defensa, también influye cómo actúa el ejército en el área.
Un indicador de esto es el índice de letalidad. Por otra parte, el análisis argumenta que, en contraste con la Guardia Nacional, la Sedena sigue teniendo mayor presencia en la entidad. Mientras que la guardia tiene 3 mil 67 elementos desplegados y ha estado involucrada en 14 incidentes violentos, el ejército tiene 3 mil 972 y reportó 124 incidentes en el mismo periodo.
Además, a partir de 2020, cuando recibió el mando operativo de la Guardia Nacional, la Sedena incrementó el número de elementos disponibles para despliegue en el territorio nacional. Con esto, el ejército tiene a su disposición casi 200 mil efectivos.
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