Detuvieron a cuatro presuntos implicados en el accidente aéreo donde murieron Martha Erika Alonso y Rafael Moreno Valle

A dos años de la muerte de la ex gobernadora de Puebla, Martha Erika Alonso, y de su esposo, Rafael Moreno Valle, en un accidente aéreo en el poblado de Santa María Coronango, cuatro personas que habrían estado implicadas en el mantenimiento de la aeronave en la que viajaban fueron detenidas.

De acuerdo con información oficial, entre los detenidos están el dueño de la compañía y dos mecánicos del avión. Gilberto Vladimir Montalvo González, abogado de uno de los técnicos, Ricardo “N”, dijo a El Sol de Puebla que la detención de su cliente se llevó a cabo cerca de las 18:00 horas del 24 de diciembre en la colonia Del Valle, en Puebla.

Esta acción la ejecutaron las autoridades poblanas mediante una orden de aprehensión librada en su contra por el delito de homicidio, aunque el litigante informó que hasta el momento no se conoce el grado de responsabilidad, pues no le han permitido establecer contacto con él, por lo que interpondrán un recurso de amparo a causa de las presuntas violaciones al debido proceso.

Familiares del técnico en aviación también declararon que Ricardo “N” ha colaborado con las autoridades poblanas en las investigaciones correspondientes aun cuando por cuestiones de trabajo tuvo que mudarse al estado de Chihuahua.

El defensor del detenido también refirió que su cliente advirtió a la pareja sobre el hecho de que la aeronave no se encontraba en condiciones para volar, sin embargo, dijo que los políticos no siguieron sus recomendaciones y de todas formas decidieron usar el vehículo.

Por otra parte, en Ciudad de México, una mujer fue detenida por su presunta relación con este accidente, informó la Fiscalía General de Justicia de la capital. La orden de aprehensión en contra de María “N” se ejecutó en colaboración con la Fiscalía de Puebla en la colonia Santa María la Ribera, en la alcaldía Cuauhtémoc.

De acuerdo con el reporte de la FGJ-CDMX, ella se desempañaba como responsable del taller donde la aeronave recibía mantenimiento. También señalaron que se le imputó “la probable comisión de los delitos de homicidio y daño a propiedad ajena, ambos a título de culpa y por falsedad de declaraciones”.

Tras la detención, las autoridades capitalinas la entregaron a la Fiscalía de Puebla en apego al convenio de colaboración que establecieron. Por tanto, María “N” fue trasladada a la entidad para ponerla a disposición de un juez que determinará su situación jurídica.

Cabe recordar que la información sobre las causas del accidente ya se habían hecho públicas en marzo de este año, cuando el entonces secretario de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriú, presentó un dictamen en donde se detalló que uno de los actuadores lineales de alabeo, que son los que mueven las aspas y dan estabilidad a la aeronave, tenía dos tornillos sueltos.

Esto provocó que el helicóptero se invirtiera en vuelo, luego se impactara contra el suelo y posteriormente se incendiara. “Fue la pérdida de control de la aeronave debido a un alabeo repentino hacia la izquierda, que no fue recuperado por el piloto al mando y provocó el impacto”, dijo.

También señaló que al analizar la bitácora de vuelo, se encontró que el 13 de diciembre, 11 días antes del accidente, estaba dañado el actuador lineal del sistema de aumento de estabilidad número dos y necesitaba reemplazo; sin embargo, la aeronave siguió operando. “El helicóptero debía estar en tierra. No debía volar”, puntualizó el funcionario.

Acerca de esto, dijo, la empresa Servicios Aéreos del Altiplano, SA de CV, tenía conocimiento y a pesar de ello mantuvieron la aeronave en servicio. Después de ese informe, Jiménez Espriú informó que se habían iniciado las auditorías técnicas y administrativas a la empresa operadora y también al taller de mantenimiento Rotor Flight Services.

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