Semefo tiene más de 1,400 restos humanos sin identificar en Jalisco

El Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF) atraviesa una de sus peores crisis en cuanto a la acumulación de cuerpos: incluso peor que la de 2018, durante el gobierno de Aristóteles Sandoval Díaz, donde Luis Octavio Cotero rentó dos tráileres para almacenar cuerpos.

Cabe recordar que, después del despido de Cotero Bernal, se alquiló uno más. La cifra fue alarmante y se reconoce que hasta ese momento se acumularon alrededor de 900 cuerpos.

De acuerdo con una nota de El Diario NTR Guadalajara, quien solicitó una serie de documentos a transparencia y pudo establecer contacto con colaboradores del IJCF, la institución tiene cuerpos apilados por todos lados. La pieza periodística describe que los cadáveres están formados en filas para iniciar sus respectivas autopsias y que los forenses trabajan continuamente sin moverse de su sitio.

Asimismo, señalan que los refrigeradores que procuran preservar los cuerpos trabajan a marcha forzada, incrementando las descomposturas en los mismos.

Agregan que conforme a lo señalado en el informe Reporte de cuerpos, secciones anatómicas y restos óseos resguardados, emitido el 9 de junio de 2020 por el Servicio Médico Forense (Semefo), notifican el contenido del anfiteatro, el refrigerador, cámara chica, cámara grande y Belén, localizada junto al Hospital Civil Fray Antonio Alcalde.

Es gracias a este reporte que el medio de comunicación pudo saber que para el cierre de 2018 había 121 cuerpos, 13 secciones anatómicas y 43 restos óseos en el IJCF; para el cierre del 2019 hubieron 237 cuerpos, 229 secciones anatómicas y 11 restos óseos; para el 2020 es cuando inicia la crisis, pues de enero a junio, es decir, a seis meses de que termine el año, se indicó la existencia de 280 nuevos cuerpos, 1,941 nuevas secciones anatómicas y 21 nuevos restos óseos, para un total de 2,896 restos humanos.

Conforme a la investigación, y al cotejar esto con los datos que aparecen en la plataforma de Personas Fallecidas Sin Identificar del gobierno local, se descubre que en ese registro hay 1,550 personas que se encuentran bajo el resguardo del IJCF, lo cual sugiere una diferencia no aceptada de 1,436.

Desde el inicio de la llamada guerra contra el narco desatada en el gobierno de Felipe Calderón, las tasas de homicidios y desapariciones se han incrementado notablemente. A la par de este fenómeno, la acumulación de cuerpos en las morgues locales y el descubrimiento de nuevas fosas clandestinas se ha convertido en un flagelo tan normal que las familias de los deudos han iniciado jornadas nacionales para poder esclarecer la desaparición de sus seres queridos.

A pesar de haber confrontado datos de distintas dependencias en el estado gobernado por Enrique Alfaro, la entidad en la que se han encontrado más cuerpos de manera aislada o en fosas clandestinas es en Guanajuato, entidad gobernada por el Partido Acción Nacional (PAN) a cargo de Diego Sinhué.

De acuerdo con cifras oficiales, este estado congrega el 80% de las fosas clandestinas encontradas en la República desde 2009, lo que vendría a representar en números reales un total de 164.

El “Informe sobre la situación de fosas clandestinas en el estado de Guanajuato (de enero de 2009 a julio de 2020)”, publicado por académicos y activistas, contabilizó 109 fosas hasta el 2019. En este sentido, durante este año se añadieron las ocho encontradas en la presa El Conejo, en Irapuato, en septiembre, las 65 fosas en Salvatierra en octubre, y las 33 fosas halladas en Cortázar el 1 de noviembre.

A pesar de estos datos, las autoridades de dichos estados continúan trabajando en materia de seguridad para resolver los casos que se abren con esto; sin embargo, y a pesar de recibir ayuda por parte de organizaciones civiles, no se pueden dar abasto ante tantos reportes de gente desaparecida.

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