La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) ha señalado en varias ocasiones al gobernador de Tamaulipas, Francisco Javier Cabeza de Vaca, por irregularidades. Ahora, se dio a conocer que uno de sus socios, Baltazar Higinio Reséndez Cantú, aparecería en la “lista Cisen” de 2014 y en la “lista Ficen” de 2008 por actividades sospechosas relacionadas con el lavado de dinero.
Además, existe otra controversia por 4 millones 315 mil 800 dólares, informó la revista semanal Proceso. La dependencia señalaría a Reséndez Cantú por “operaciones inusuales en efectivo” que habrían tenido lugar entre 2002 y 2018 en siete depósitos de 6 millones 973 mil 441.38 pesos.
Además se identificaron otras 23 transferencias de 2 millones 144 mil 720 dólares, otras 23 operaciones por un monto 718,987 dólares y 17 más de 21 millones 309 mil 42.
De acuerdo con la revista, la operación más relevante fue la que tuvo lugar en 30 de abril de 2018, en la que se dispusieron 15 millones 53 mil 500 pesos de una sucursal en Reynosa, Tamaulipas.
Otro de los socios que dio de que hablar fue Juan Francisco Tamez Arellano, quien en 2019 habría depositado 33 millones 44 mil pesos al gobernador en cuatro transferencias. Además, le giraría un cheque durante ese mismo año por 5 millones 252 mil 231 pesos.
La UIF informó que hasta el momento se desconoce el motivo de las transacciones realizadas, pero que considera relevante que Tamez Arellano recibiera 33.5 millones de Baltazar Higinio.
La organización también señalaría a la empresa Productora Rural y Agropecuaria Regional Cava por que “opera con personas físicas y morales destacadas por diversas irregularidades, que van desde el rápido movimiento de fondos, recibir recursos de una casa de bolsa para expedirlos a personas físicas sin actividad económica relacionada y retirarlos en efectivo”, señaló el periodista Alejandro Caballero.
Sobre el tema, destacó, también se contaría con una factura enviada a Bluelimit Comercial, SA de CV, por 12.8 millones de pesos. Dinero que la empresa declararía haber recibido por una compraventa de inmuebles.
Por otro lado, se encontraron ocho movimientos para la adquisición de inmuebles por 63 millones 479,299 pesos, los cuales no aparecen en sus declaraciones de ingresos. De acuerdo con ellos, el hombre habría tenido 4.2 millones de pesos entre 2015 y 2019.
“Aparenta incongruencia entre lo que gasta y declara ante la autoridad fiscal, lo que sin duda es un dato más que nos permite presumir la participación en el delito de recursos de procedencia ilícita”, señaló la UIF.
El semanario publicó a inicios de diciembre que la UIF preparaba una demanda penal en contra de Cabeza de Vaca por los delitos de enriquecimiento ilícito, desvío de recursos y defraudación fiscal.
Una investigación encontró que sus ingresos no corresponden con los bienes y propiedades que posee, las cuales ascienden a los 140 millones de pesos, aproximadamente.
Son 82 millones 794 mil pesos, los que según la UIF, existen de diferencia entre lo que García Cabeza de Vaca a obtenido ha lo largo de su carrera política, con lo que tiene acumulado en ranchos y propiedades
En una conferencia del presidente Andrés Manuel López Obrador, se defendió de las acusaciones y aseguró que se trataba de ataques de sus adversarios que buscan señalarlo por corrupción.
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