El Senado aprobó una polémica reforma sobre captación de divisas; Banxico advirtió que viola su autonomía

El Senado aprobó este miércoles una polémica reforma a la Ley del Banco de México en materia de captación de divisas extranjeras que pondría en juego la autonomía del banco central mexicano, de acuerdo con la propia institución.

Con 67 votos a favor, 23 en contra y 10 abstenciones, se validó, en lo general, la iniciativa del senador Ricardo Monreal, en medio de fuertes críticas. En lo particular, las modificaciones específicas se aprobaron con 70 votos a favor, 23 en contra y una abstención.

El documento, que fue enviado a la Cámara de Diputados para su discusión y, en su caso, aprobación, precisa que las divisas extranjeras que no puedan repatriarse a su país de origen serán compradas por el Banco de México (Banxico) para que pasen a formar parte de las reservas internacionales del país.

Además, entre los cambios realizados en lo específico, se otorgó la certeza jurídica de que los dólares siempre se podrán canjear por pesos en los bancos de una forma legal y segura, obteniendo por ellos la mejor paridad del mercado.

Sin embargo, la aprobación recibió fuertes cuestionamientos no sólo desde la oposición, sino desde los aliados que Morena, el partido de la mayoría y fundado por el actual presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, tiene en el Banxico.

“Lamentable que se hayan aprobado en el Senado reformas que ponen en riesgo a las reservas internacionales y que atentan contra la autonomía del Banco de México. Espero que en la Cámara de Diputados se corrija esta situación”, aseguró Gerardo Esquivel, subgobernador de Banxico.

El mensaje fue replicado por Ciro Murayama, consejero del INE (Instituto Nacional Electoral). “Hay autonomías constitucionales indispensables para la estabilidad del país. Una de ellas es la de Banxico en materia económica”, expresó en Twitter.

El comentarista Mario Schettino también advirtió problemas con las reformadas aprobadas en el Senado. “Esto pone en riesgo al Banco de México porque esos dólares no tienen un origen claro, y podrían provenir de lavado de dinero”, aseguró.

“Esto podría poner al Banco de México en situación de ser considerado parte de un esquema internacional de lavado de dinero... Y esto podría convertirse en un grave problema financiero... Por otro lado, no veo la necesidad de modificar el status quo a costa de correr un riesgo tan elevado”, completó.

Morena, por su parte, defendió la aprobación de la iniciativa de Monreal. El presidente de la comisión de Hacienda, Alejandro Armenta, afirmó que la reforma “no promueve el lavado de dinero”, sino que favorece a los trabajadores migrantes que en la contingencia sanitaria enviaron casi 10% más de remesas para pagar la atención médica de sus familiares.

Sin embargo, la senadora Minerva Hernández, del opositor PAN (Partido Acción Nacional), consideró falso que con la aprobación de este dictamen se apoye a la población migrante mexicana. “Porque, si eso quisieran, lo hubieran hecho en la asignación presupuestal para 2021″, argumentó.

Incluso el PT (Partido del Trabajo), aliado legislativo de Morena, cuestionó la reforma. “No está claro cómo es que favorece a las personas que reciben remesas, pues éstas representan una porción mínima de las divisas objeto del dictamen”, explicó la legisladora Nancy de la Sierra, de dicho partido.

El senador Emilio Álvarez Icaza, sin grupo parlamentario, fue más allá. Indicó que la aprobación de esta iniciativa convertiría al Banco de México en una “lavadora de dinero del narcotráfico”. “Si el problema son las remesas que envían los migrantes, la alternativa es crear mecanismos para protegerlas con instituciones financieras”, remarcó.

El procedimiento de compra de divisas contemplado en la reforma incluirá la obligación de las instituciones de crédito para contar con procesos, sistemas y personal adecuados para recabar, verificar y conservar la información de identificación de sus clientes o que permita evaluar el riesgo que pueden representar en la materia.

Además, también recabará la información de los procesos que deberán seguir, así como tener el personal adecuado para monitorear las operaciones a través de los sistemas automatizados con que cuente, con el fin de detectar operaciones inusuales.

Monreal, por último, aseguró que era una iniciativa “progresista” y de “carácter social”. “Lo único que pretende es repatriar los dólares, que son una moneda de origen, a Estados Unidos. Y, que el Banco de México pueda, potestativamente, incorporar los dólares como reserva nacional o internacional de México”, dijo.

Además, precisó que “no hay ninguna agresión a la autonomía (…) ni tampoco temor o peligro de que se filtre el lavado de dinero”. “Yo espero que haya quedado satisfecho (Banxico), pero el Poder Legislativo lo que tiene que generar es satisfacción a la población y al Banco de México respetarlo”, concluyó.

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