Inundaciones y tragedia: las fatales consecuencias de la deforestación de la selva del sureste de México

Entre 2001 y 2019, en Campeche se perdieron 186,000 hectáreas de cobertura arbórea, lo cual ha afectado en temporadas de lluvias o huracanes

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(Foto: Ilustrativa/Twitter@pcivilchiapas)
(Foto: Ilustrativa/Twitter@pcivilchiapas)

La sobrexplotación de la naturaleza tiene importantes consecuencias a nivel social para los habitantes de ciertas zonas. En la Península de Yucatán, al sureste de México, los habitantes deben enfrentarse a los serios problemas que conlleva la deforestación de la selva, misma que no ha parado desde hace una década con la intensión de transformarla en campos de cultivo.

Ante esta situación, diversas comunidades mayas se han pronunciado en contra de la deforestación, pues ellas se dedican a la apicultura, actividad en la cual resulta necesario que la selva se mantenga en buen estado de conservación para poder sacar provecho de las abejas.

De acuerdo con información del portal Mongabay Latam, en Campeche, una comunidad maya ha intentado rescatar prácticas ancestrales en la producción de miel a partir de la conservación de una abeja sin aguijón, la cual realiza sus colmenas al interior de troncos huevos; sin embargo, tras la tala de árboles y la implementación de plaguicidas, estas labores se han vuelto titánicas.

Según un informe de Global Forest Watch, citado por el mismo medio, entre 2001 y 2019, en el municipio de Hopelchén, Campeche, se perdieron 186,000 hectáreas de cobertura arbórea, es decir, un 20% menos de lo que se tenía en el 2000. Incluso investigadores de la Universidad de Veracruz apuntan que la tasa de deforestación es cinco veces más alta que la promedio en todo el país.

Los efectos de la tormenta
Los efectos de la tormenta tropical en Campeche. (Foto: Twitter)

La consecuencia de esto se vio tan sólo hace algunas semanas, cuando los huracanes Iota y Eta provocaron destrozos en estados como Tabasco, Chiapas y también en otros países de Centroamérica, como Guatemala, Nicaragua y Honduras.

En el caso de Campeche, las lluvias provocadas por las tormentas tropicales Amanda y Cristobal, fueron las más intentas en años. Según la Comisión Nacional del Agua (Conagua) en esta entidad, tan sólo durante cinco días se registró la misma cantidad de lluvia promedio que cae en todo el año.

Todas estas precipitaciones provocaron daños a más de 120 comunidades de la Península de Yucatán, según organizaciones civiles y colectivos de campesinos. En relación a la producción de miel en Campeche, que es una de sus principales actividades económicas, las afectaciones fueron del 93% respecto a las colmenas, mientras que un 28% se perdió por completo.

El cambio climático también ha
El cambio climático también ha incidido en las fatales consecuencias que los huracanes dejan a su paso. (Foto: Cuartoscuro)

“Las grandes deforestaciones de la selva y las zonas costeras han generado un gran impacto en el territorio de la Península de Yucatán: contaminación de suelos, de agua, pérdida de biodiversidad”, explicó la doctora en geografía y maestra en ingeniería ambiental del Instituto Nacional de Investigaciones Forenses Agrícolas y Pecuarias, Yameli Aguilar Duarte.

Además, la especialista dio una explicación del porqué los fenómenos meteorológicos han sido más devastadores en las últimas épocas y es que “al no tener ecosistemas sanos, no tenemos las barreras naturales ante los impactos de tormentas y huracanes”.

Según el WEF Global Risk Report 2020, América Latina y el Caribe están identificadas como regiones particularmente vulnerables a los impactos del cambio climático, a causa de una combinación de factores, como la falta de gestión eficiente de los recursos hídricos, la deforestación y la insuficiencia de recursos financieros para prevenir, adaptarse o responder a los cambios.

En este sentido, la Conagua ha señalado que para el 2050, el clima del país será entre dos y cuatro grados más cálido, lo cual representará un importante riesgo respecto a la intensidad de los eventos hidrometeorológicos, es decir, las olas de calor, lluvias extremas y sequías serán aún más prolongadas.

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