El Juzgado Quinto de Distrito de Amparo en materia Penal en Ciudad de México negó la suspensión definitiva de la orden de aprehensión contra Francelia Salgado Patiño, madre de Ángel Casarrubias Salgado, mejor conocido como El Mochomo, uno de los presuntos líderes del grupo criminal Guerreros Unidos, vinculado con la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
La orden fue librada por un juez de Distrito de Procesos Penales Federales con residencia en el Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) No. 1, Altiplano, en el Estado de México, donde su hijo se encuentra preso.
Salgado Patiño está siendo investigada, por la Fiscalía General de la República (FGR), por el delito de cohecho y delincuencia organizada. Habría entregado la cantidad de USD 2 millones a tres funcionarios judiciales para que desaparecieran las pruebas en contra de El Mochomo y se le dictara el auto de libertad. Uno de ellos, de acuerdo con Milenio, era un secretario de Acuerdos del juzgado Segundo de Distrito de Procesos Penales Federales en el Estado de México.
Fue la razón por la cual la madre de Casarrubias Salgado promovió el juicio de amparo. Tramitada el pasado 29 de septiembre, a través de una demanda de garantías aseguró que tenía miedo que el mandamiento judicial estuviera acompañado de agresiones en contra de su integridad física, señaló La Jornada.
La juez Patricia Marcela Diez, de acuerdo con el fallo, declaró este miércoles negarle la protección de la justicia. No obstante, la madre de El Mochomo puede objetar la sentencia.
El presunto líder de Guerreros Unidos fue liberado en julio de este año y reaprehendido antes de que saliera de las inmediaciones del Cefereso.
La FGR reveló que en el caso de Casarrubias Salgado se descubrió el pago de varios millones de pesos, realizados por personas cercanas a él, para que se le otorgara la libertad.
El pasado 2 de julio, la Fiscalía intervino una comunicación entre Salgado Patiño y el abogado de su hijo, Arturo Rodríguez García. El abogado le señaló que todo “estaba listo” para beneficiar a El Mochomo y poder liberarlo: solamente se tenía que pagar a un secretario de acuerdos del juzgado.
De acuerdo con Milenio, la madre aceptó y le pidió al abogado decirle al secretario que “son gente seria”. Además, remarcó que el dinero se entregaría después de que su hijo fuera liberado. “Dando y dando”, dijo.
El litigante Rodríguez García fue vinculado a proceso, junto con El Mochomo, en septiembre del presente año por el delito de delincuencia organizada. Al abogado también se le imputó por cooptar autoridades, actividades de tráfico de drogas, y de prestanombres para la compra y venta de propiedades.
José Ángel Casarrubias es uno de los sospechosos de haber ordenado la ejecución de los 43 normalistas de Ayotzinapa el 26 de septiembre de 2014. Aunque la “verdad histórica” de Jesús Murillo Karam, titular de la entonces Procuraduría General de la República, dijo que los normalistas habían sido quemados en el basurero de Cocula, Osvaldo Ríos Sánchez, El Gordo, miembro del cártel, declaró que fueron enterrados en una fosa de Pueblo Viejo por órdenes de El Mochomo.
Con la detención de José Ángel Casarrubias, el cártel de los Guerreros Unidos perdió al último de sus líderes de la familia. Su hermano Mario Casarrubias, conocido como El Sapo Guapo, junto con Cleotilde Toribio Rentería, El Tilde, fundó la organización para obtener el control de Guerrero luego de la muerte de Arturo Beltrán Leyva en 2009.
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