La Cámara de Diputados vivió la semana pasada una serie de sesiones en el Pleno que fueron tensas y por momentos el alto voltaje incluso interrumpió el proceso en más de una ocasión, pero Morena, el partido de la mayoría, consiguió aprobar y enviar al Senado el dictamen que extingue 109 fideicomisos y significaría un golpe para varios sectores, incluido el científico, el cine, los derechos humanos e incluso el deporte.
Pero el pronóstico de esta semana no contiene una caída en la intensidad ni en las expectativas de los morenistas o la oposición, que se ha unido en un solo bloque que intentó bloquear fallidamente la extinción de los fondos mencionados y que ahora intentará revertir su suerte en la próxima discusión parlamentaria.
Se trata de la discusión por el Fondo de Protección contra Gastos Catastróficos, que durante la discusión por la desaparición de los fideicomisos provocó que la oposición incluso tomara la tribuna para evitar que incorporaran este mecanismo, de más de 100,000 millones de pesos, dentro de la extinción.
Morena tuvo que retirar su propuesta para avanzar con la sesiones, pero unas horas después el partido del presidente Andrés Manuel López Obrador propuso una iniciativa para reformar la Ley General de Salud, a fin de que dicho fondo pueda utilizarse en la adquisición de vacunas contra el COVID-19, que ha causado una pandemia y ha dejado en México más de 813,000 muertos.
"Vienen nuevos momentos de tensión en la Cámara de Diputados, entre otros temas porque Morena continúa con la necedad de entregar los 101,000 millones de pesos a las obras presidenciales y dilapidar las reservas acumuladas para atender las enfermedades de las familias sin seguridad social”, expresó este domingo Juan Carlos Romero Hicks, coordinador de los diputados del PAN (Partido Acción Nacional), la principal oposición parlamentaria.
Romero Hicks recordó que los diputados del PAN, junto con los legisladores del PRI (Partido Revolucionario Institucional), MC (Movimiento Ciudadano) y PRD (Partido de la Revolución Democrática), lograron evitar la consumación de esa propuesta y por ello resultará particularmente vital la discusión del paquete económico 2021 “para garantizar los fondos en el sector salud, tanto para seguir combatiendo la pandemia como las diversas enfermedades que padece el pueblo mexicano”.
Y es que el fondo en cuestión es parte del Sistema de Protección Social en Salud y busca otorgar servicios médicos de alta especialidad a los beneficiarios del Insabi (Instituto de Salud para el Bienestar), antes Seguro Popular, pero el problema del instituto es que no tiene reglas de operación.
Se trata de un fondo que atiende a personas que padecen enfermedades de alto costo (en virtud de su grado de complejidad o especialidad y el nivel o frecuencia con la que ocurren), que pueden poner en riesgo su vida y su patrimonio familiar, mediante la gestión de los servicios de salud.
Proporciona recursos monetarios, a través de un fideicomiso, a los prestadores de servicios acreditados y con convenios firmados de las 32 entidades federativas, para la atención de 66 enfermedades
“Anticipamos que habrá una gran incertidumbre respecto de cómo y quién va a financiar la atención y medicamentos para los mexicanos que hoy tienen asegurados sus tratamientos gracias a estos recursos. Si a esto sumamos la pésima operación del Insabi, el escenario es aún peor”, concluyó Romero Hicks.
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