Coronavirus en México: en qué consisten los ajustes de SSa para el registro de casos y muertes

Desde el inicio de la pandemia de COVID-19 en México, uno de los temas que más polémica ha causado es la cifra que las autoridades sanitarias reportan cada día, las cuales aumentaron significativamente este 5 de octubre, debido a ajustes que la Secretaría de Salud hizo a la metodología para la vigilancia epidemiológica.

Durante la conferencia de prensa vespertina del lunes se reportaron 28,115 casos confirmados de coronavirus y 2,789 muertes por la enfermedad más que el día anterior, a causa de que se integró una nueva categoría a las estadísticas: los casos confirmados por asociación epidemiológica.

El director General de Epidemiología de la Secretaría de Salud, José Luis Alomía, dio a conocer que estos nuevos datos toman en cuenta a todas aquellas personas que cumplan con la definición operacional de “caso sospechoso de una enfermedad respiratoria viral”, aun cuando no hayan obtenido una muestra de laboratorio o hayan tenido contacto con un caso confirmado en los 14 días previos al inicio de síntomas.

Es decir, con estos criterios también se integra a todas aquellas personas que no pudieron acceder a la toma de una prueba de coronavirus o bien, todas aquellas que fallecieron pero ni siquiera tuvieron acceso a atención médica, detalló Alomía Zegarra.

“Durante los últimos dos meses, básicamente después de que se activó esta nueva definición operacional, las entidades empezaron a usarla, tanto esta definición como una previa que también ya habíamos comentado que era la dictaminación clínico-epidemiológica”, la cual se aplica para explicar las defunciones, resaltó el funcionario.

Así fue como las cifras de la pandemia aumentaron de manera relevante este 5 de octubre, pues este día se registraron 28,115 casos confirmados y 2,789 defunciones a causa de la enfermedad. El cambio es significativo si se toma en cuenta que del sábado 3 al domingo 4, el aumento de casos de 3,712, mientras que el de las muertes fue de 208.

No obstante, Alomía Zegarra aseguró que el incremento de datos tan marcado que se dio en las estadísticas este 5 de octubre no fue de un día para otro, sino que se contabilizaron en el país desde el inicio de la pandemia hasta la fecha, por lo que forma parte de un acumulado.

Sobre el tema, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, resaltó el hecho de que si bien el uso de las pruebas de laboratorio es útil para el diagnóstico de la enfermedad en una persona, este no es el único método con el que se cuenta para dicho fin.

“La vigilancia epidemiológica busca ampliar el panorama de diagnóstico y en muchas circunstancias no se puede tener el resultado de una prueba de laboratorio, pero analizando la situación, el contexto, si una persona tuvo contacto con alguien que tiene diagnóstico por laboratorio se infiere que también esa persona, con los mismos síntomas o parecidos, tiene COVID-19”, comentó López-Gatell.

Por otra parte, según las estimaciones oficiales, hasta el día 128 de la llamada nueva normalidad, la epidemia activa está integrada por 34,915 pacientes, lo que equivale a un estimado del 4 por ciento. Esto quiere decir que sólo esta cantidad de individuos han manifestado los síntomas de COVID-19 en los últimos 14 días y por tal motivo son los que pueden esparcir la enfermedad.

Asimismo, por décima semana consecutiva, se confirmó que el brote de SARS-CoV-2 continúa a la baja, lo cual permite tener una pronta reapertura a las actividades sociales y un mejor desempeño de los servicios de salud en el país; sin embargo, la Secretaría de Salud no desestimó la posibilidad de nuevos brotes, como en Europa. De tal modo que el semáforo epidemiológico continuará en color naranja en algunas entidades del país.

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