La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) dio a conocer este miércoles el informe mensual sobre las finanzas y deuda pública a agosto de 2020.
A través de un desglose de cifras, la dependencia señaló que durante los primeros ocho meses de 2020, los ingresos petróleos se redujeron 38% en términos reales, a a pesar de un aumento en la producción de crudo respecto al año anterior.
Uno de los factores que pudieron contribuir a este comportamiento, según la SHCP, es la caída en la demanda global de hidrocarburos, como consecuencia de las medidas implementadas por los gobiernos del mundo para mitigar la propagación del virus SARS-COV-2, causante la enfermedad de COVID-19.
De acuerdo con los datos, de enero agosto de 2019 sumaron 543,811.7 los ingresos petroleros del gobierno, mientras que en el mismo periodo de este año, la cifra ascendió a 348,312.3, lo que arroja una diferencia negativa de 38 puntos porcentuales.
En los meses que van del año se han desencadenado una serie de eventos provocando afectaciones en la economía mundial. Uno de ellos fue el ocurrido en marzo pasado, cuando los precios referenciales del crudo presentaron caídas importantes por el congelamiento de la actividad económica y la guerra de precios desatada entre Arabia Saudita y Rusia.
A este factor, se le sumó la baja en la demanda mundial de combustible, lo cual respondió a las restricciones de viaje y movilidad social derivadas de la pandemia.
“Entre los diversos impactos de lo anterior destaca una fuerte caída en la demanda por petróleo y otras materias primas, que está propiciando una reducción en sus precios internacionales. La situación del mercado petrolero se ha visto exacerbada por la guerra de precios del petróleo entre Arabia Saudita y Rusia, que ha resultado en una mayor disminución en los precios de los energéticos a nivel global”, señaló la dependencia que encabeza Arturo Herrera en el documento Pre-criterios 2021.
La SHCP destacó que gracias al manejo responsable de los recursos públicos, se ha podido atender adecuadamente la epidemia por COVID-19. Al mismo tiempo, se ha logrado “mantener finanzas públicas sanas, a fin de continuar favoreciendo el bienestar de la población durante esta etapa de recuperación económica”.
A partir del primero de junio, el gobierno federal puso en marcha el regreso a la “nueva normalidad”, estrategia para reactivar la vida económica, social y educativa del país.
Como resultado de esta disposición, “los ingresos no petroleros aumentaron 4.3 por ciento real respecto al mismo periodo de 2019 y los del Gobierno Federal lo hicieron 6.0 por ciento real”, señala la dependencia.
Por otra parte, en el documento se se explica que los ingresos del Gobierno Federal crecieron 1.6% real anual, “sin recurrir a impuestos ni endeudamiento”.
En este sentido, lo recaudado por el Impuesto al Valor Agregado (IVA) incrementó 14.2 % en agosto, luego de tres meses presentando disminuciones y en línea con el proceso de recuperación económica, lo cual ayudó a fortalecer la recaudación.
Adicionalmente, se destaca que el gobierno federal incrementó 7% real anual entre enero y agosto el monto de los recursos destinados a atender los rubros de salud y económicos, debido a los efectos negativos de la contingencia sanitaria por coronavirus en el país.
“No se ha solicitado endeudamiento adicional al autorizado por el Congreso de la Unión y la deuda del Gobierno Federal se mantiene sólida, denominada principalmente en pesos”, aclaró la Secretaría de Hacienda.
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