Entre videoescándalos y más de 64.000 muertos por COVID-19: así llega López Obrador a su segundo Informe de Gobierno

Este martes primero de septiembre, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador presenta su segundo Informe de Gobierno desde que asumió el cargo.

Tres expertas –en salud, política y economía– compartieron con Infobae México su análisis sobre la situación en la que el mandatario llega a esta segunda rendición de cuentas a los mexicanos.

64.000 muertos por COVID-19... y contando

La mitad de los 12 meses que han transcurrido desde el primer Informe de Gobierno que rindió el presidente López Obrador, se ha visto totalmente trastocada por la llegada de la pandemia del COVID-19 al país.

El primer contagio en territorio mexicano se registró el pasado 27 de febrero. Actualmente en el país se registran 64,414 fallecimientos y un total de 599,560 casos positivos al virus acumulados. Un panorama bastante desalentador tomando en cuenta que el propio subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell –la cara pública del gobierno ante la pandemia– señaló que, en el “escenario más catastrófico” el país podría alcanzar una cifra 60,000 decesos por el virus. Esa cifra se rebasó el 22 de agosto.

“El manejo de la pandemia ha sido terrible por parte las autoridades. Ha sido un manejo insuficiente. Ha sido un manejo negligente”, dijo a Infobae México la doctora Laurie Ann Ximénez-Fyvie, quien es jefa del laboratorio de genética molecular de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). “Una estrategia que se supo que iba directo hacia el fracaso; sin embargo, después de casi seis meses no se ha rectificado”, lamentó.

Para la también doctora en ciencias médicas con especialización en microbiología por la Universidad de Harvard, hay cuatro factores fundamentales, correlacionados entre sí, que han demostrado, en otros países, ser la clave para el manejo de la pandemia: el control de fronteras y de tránsito interno; la contención de casos; la vigilancia; y la mitigación.

“Se sabía perfecto qué se tenía qué hacer y sin embargo no se hizo. Y en lugar de hacerlo, se manejó siempre una política demagógica, tratando de mediar la opinión pública, en lugar de realmente hacer algo”.

Y explicó que, aunque era imposible mantener a México sin casos de COVID-19, sí hubiera sido posible otro escenario, uno mucho menos catastrófico del que el país vive ahora, y según los pronósticos, puede que no sea el peor se presente. No obstante, indicó que aún es posible cambiar tal destino, con medicina y atención temprana.

La crisis del COVID-19 arrastró a la economía

Pero no solo se trata de una crisis sanitaria, ya que la pandemia ha golpeado fuertemente la economía a nivel nacional y, específicamente, la personal de una gran parte de los mexicanos.

Un indicador de esto es la cifra de desempleo. Actualmente se han perdido alrededor de un millón de puestos de trabajo en todo el país. Esto a raíz de que muchas pequeñas y medianas empresas (PyMES) no resistieron la baja que les representó la Jornada de Sana Distancia y se vieron en la necesidad de cerrar –entre abril y junio fueron más de 10,000 las que cerraron–, o en un caso poco más alentador, se vieron obligados a recortar su plantilla laboral.

Pero fue el mismo López Obrador quien se negó rotundamente a apoyar a empresarios, con recursos como la condonación o reducción de impuestos, para hacer frente a la crisis económica por la epidemia.

Para Gabriela Siller, directora de análisis económico financiero de Banco Base, es en ese tipo de acciones donde se encontraba la manera de haber hecho que el impacto económico fuera menos drástico, con “una política fiscal contracíclica donde se podían haber redireccionado recursos, principalmente, de los grandes proyectos de infraestructura que tiene esta administración hacia proyectos de menor plazo y enfocados, precisamente, en los estados y en las industrias más severamente afectadas por la pandemia”.

Además la economista explicó a Infobae que un endeudamiento con el Fondo Monetario Internacional (FMI) hubiera sido bastante viable, ya que se contaba con la línea de crédito necesaria, además de que se trata de la peor crisis sanitaria en al menos 100 años.

Sin embargo, la experta también aclaró que aún sin pandemia, se hubieran registrado a estas alturas niveles económicos negativos, así como un aumento en los niveles de desempleo.

“Se trata de la peor crisis desde la Gran Depresión, provocada en parte por la pandemia del COVID-19, y en parte también por la inercia económica que ya se vivía en México”, indicó Siller explicando que las cifras desalentadoras en el país, previo al virus, fueron consecuencia de la pérdida de confianza empresarial y las caídas en la inversión fija bruta.

Homicidios y feminicidios no dan tregua

“Abrazos, no balazos”, ha sido una de las frases insignia del presidente Andrés Manuel López Obrador. La menciona siempre que habla de su estrategia de pacificación del país. Sin embargo las cifras apuntan a otra realidad. Y es que el mandatario llega a su segundo informe con una gran deuda en cuestión de seguridad.

En los asesinatos relacionados con el género, los feminicidios, desde que AMLO asumió la presidencia en diciembre de 2018 hasta la fecha, suman al menos 1,581, según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).

El mes en que AMLO asumió la presidencia ha sido en el que más feminicidios se registraron, con 98. Y después le sigue el pasado mes de junio, con 96 casos. Mientras que en lo que va de 2020, las cifras oficiales señalan que han ocurrido 549.

Sin embargo, esos números se ven ampliamente rebasados por los que reporta el Mapa Nacional de los Feminicidios en México, creado por la geofísica María Salguero. Tan solo entre el 16 de marzo y el 30 de abril, ya con la pandemia, reportaron 405 casos de feminicidio en el país.

Mientras que el pasado marzo fue el mes con más homicidios dolosos registrados durante el sexenio de López Obrador, con 2,628 episodios, de acuerdo con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).

Y aunque desde dicho periodo se ha registrado una ligera baja en estos delitos, 2020 sigue ubicándose como el año, con AMLO en la presidencia, con más homicidios dolosos, con un promedio de 95 al día.

“La corrupción también toca su proyecto”

López Obrador también llega a presentar su segundo Informe de Gobierno envuelto en la polémica de un videoescándalo. Esto luego de que hace unos días se filtraron unas imágenes en las que aparece su hermano Pío López Obrador recibiendo paquetes de dinero de parte de David León, hasta hace poco coordinador nacional de Protección Civil.

El mandatario negó que se tratara de un escándalo de corrupción y se limitó a decir que el dinero que aparece en el video fueron aportaciones del pueblo para financiar su movimiento.

“El discurso que el presidente plantea de que lo que hacen los suyos no es corrupción, insulta la inteligencia de los mexicanos”, consideró la politóloga e investigadora María Marván Laborde. “Lo que estamos viendo es una mayor polarización, un desprecio al Estado de derecho, desprecio a la división de poderes y un discurso en el que (AMLO) no pierde la oportunidad de plantearse como referente moral, a pesar de la evidencia que tenemos con la serie de videos que han aparecido, donde resulta evidente que la corrupción también toca su proyecto”.

Por otro lado, la experta en política se refirió también a los niveles de aceptación de la ciudadanía al presidente López Obrador. “Me parece casi natural que haya perdido popularidad, no hay presidente en ejercicio que no pierda popularidad; entró con un nivel de aceptación tan alto, que lo único que podíamos esperar es que bajara”.

Sin embargo, advirtió como preocupante que, pese a ver la baja en su aceptación, el mandatario no reconozca qué es lo que está haciendo mal, y en cambio, afirme que “él tiene otros datos”, como lo hizo en la conferencia matutina de este lunes, al afirmar que entre el 65-70% de los mexicanos aprueba su gestión, mientras que a nivel mundial se ostentó como el segundo puesto del ranking de una presunta encuesta de jefes de Estado.

No obstante, el resultado de las encuestadoras señala que sus niveles de aceptación han ido de 80-82 puntos porcentuales –en su inicio– a una caída hasta 58 puntos –actualmente–, una pérdida de al menos 20 puntos. Así lo refleja, por ejemplo, la encuesta nacional realizada por El Financiero.

“No por mucho que él diga que nos está yendo muy bien, nos va a convencer de que nos está yendo muy bien”, sentenció Marván Laborde.

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