El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) decidió que se realizara una encuesta abierta a militantes y simpatizantes del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) para que puedan elegir al nuevo líder.
El Tribunal mencionó que el Instituto Nacional Electoral (INE) “se deberá encargar de la realización de la encuesta nacional abierta a la militancia y simpatizantes del partido” para que puedan elegir a su presidente y al secretario general de Morena.
En un principio se había dicho que no se iba a poder realizar el ejercicio de votación por la reciente pandemia, COVID-19, que hay en el país. Sin embargo, el TEPJF consideró realizar la encuesta con “las medidas de cuidado a la salud indispensable”.
La encuesta va a estar abierta a todos “que se autoadscriban como militantes simpatizantes de Morena”, pues al padrón le hace falta “certeza y confiabilidad”.
Hay cuatro personajes que van por la dirigencia de Morena: Bertha Lujan, quien fue secretaria de contraloría del Distrito Federal, Yeidckol Polevnsky, la actual presidenta de Morena, Mario Delgado, encabeza la bancada de Morena en la Cámara de Diputados y Alejandro Rojas Díaz Durán, que ha pertenecido al PRD y al PRI.
Alfonso Ramírez Cuéllar, actual dirigente de Morena, especificó que lo que hace el TEPJF es “intervención grosera, burda y alevosa”, ya que alertó de una posible participación de simpatizantes de oposición.
El actual líder de Morena en la Cámara de Diputados, Mario Delgado es candidato para presidir el partido y dijo que la encuesta es “para poner en manos de la gente la decisión” del liderazgo de la formación política.
El año pasado Yeidckol Polevnsky tenía que haber convocado en noviembre, del año pasado, la elección interna para renovar la dirección. Solo que lo aplazó indefinidamente por irregularidades en el censo y conflictos entre sus facciones.
Ante esa decisión distintos sectores del partido impulsaron un congreso extraordinario en contra de la presidenta de Morena para sustituirla por el diputado Ramírez Cuéllar con el fin de retornar la elección interna, que tampoco ha sido concretada.
En su conferencia matutina, el presidente López Obrador mencionó que estaba de acuerdo con la decisión: “Yo lo veo bien. ¿Por qué no se aceptó lo de la encuesta, si está en los estatutos? ¿Por qué no someterse a lo que el pueblo decida? En la democracia el pueblo es el que manda”, comentó el mandatario.
Cabe recordar que el propio Ramírez Cuéllar había denunciado la intromisión del TEPJF en los procedimientos internos del partido e incluso acusó de que miembros del Tribunal habían sido sobornados y presionados, con el fin de pisotear los estatutos del instituto político.
Refirió que la presión hacia los magistrados había sido de parte de los mismos militantes de Morena que buscan llegar a la dirigencia nacional del partido. En este sentido acusó a senadores, diputados, empresarios y funcionarios del gobierno federal, de estar involucrados en la decisión del Tribunal Electoral.
Por otra parte, mencionó que la sentencia del Tribunal era una intervención burda a la vida interna del partido y por ello llamó a la militancia del organismo a defenderlo, aunque no detalló cuáles serían las acciones que realizarían para este fin.
“Se puede dar un despojo partidario, el contenido del proyecto es una intervención burda, alevosa, que perjudicaría a la institucionalidad del país y a uno de los instrumentos de la 4T”, afirmó Ramírez Cuéllar horas antes de que se diera a conocer la determinación del TEPJF.
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