El huracán Genevieve, que llegó a ser categoría 4 de la escala Saffir-Simpson, se degradó por la tarde del miércoles a categoría 1, y este jueves se debilitó hasta tormenta tropical, no obstante, sigue provocando fuertes lluvias y vientos en el estado de Baja California.
Un boletín de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), confirmó que a las 13:00 horas, tiempo del centro de México, Genevieve se degradó a tormenta tropical.
Su centro se ubicó a 120 kilómetros al sur-sureste de Cabo San Lázaro y a 235 km al oeste-noroeste de Cabo San Lucas, ambas al interior de Baja California Sur.
Además, tenía vientos máximos sostenidos de 115 kilómetros por hora, rachas de 145 km/h y desplazamiento hacia el noroeste a 19 km/h.
La dependencia detalló que sus bandas nubosas mantendrán lluvias torrenciales de 150 a 250 milímetros en Baja California Sur, así como puntuales intensas de 75 a 150 mm y muy fuertes en regiones de Jalisco y Nayarit.
Asimismo, continúa el pronóstico de rachas de viento de 90 a 120 y oleaje de 8 a 10 metros en las costas de Baja California Sur; rachas de 50 a 60 km/h con oleaje de 2 a 4 m en las costas de Nayarit, Sinaloa y la región del Mar de Cortés, así como posibles trombas marinas.
Por su parte, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) de Conagua, estableció zona de prevención por la tormenta tropical desde Cabo San Lázaro a Todo Santos, y zona de vigilancia por efectos de Genevieve desde Los Barriles hasta La Paz, todos en Baja California Sur.
Meteorólogos pronostican que la tormenta tropical Genevieve seguirá avanzando hacia el noroeste, casi paralelo a las costas mexicanas durante este jueves, y comenzará a alejarse de la península a partir de este viernes. Se estima que a su paso, siga perdiendo fuerza de forma gradual.
Por otra parte, en el Mar Caribe se formó la Depresión Tropical Número 14. Su centro se localiza a mil 10 km al este-sureste de Cancún, Quintana Roo, y a 375 km al este de la frontera entre Honduras y Nicaragua. Se desplaza hacia el oeste a 33 km/h, con vientos máximos sostenidos de 55 km/h y rachas de 75 km/h. Se mantiene en vigilancia, debido a que la trayectoria pronosticada indica que se dirige hacia la Península de Yucatán.
Hasta ahora, el Pacífico suma siete ciclones con nombre durante esta temporada: las tormentas tropicales Amanda, Boris, Cristina y Fausto, y los huracanes Douglas (con intensidad 3-5), Elida (intensidad 1-2) y Genevieve (intensidad 1-4) en la escala Saffir Simpson.
México espera durante este año, una temporada de ciclones tropicales más activa de lo normal, puesto que se estima que lleguen entre 30 y 37 temporales entre el Atlántico y el Pacífico.
Las autoridades pronostican entre 15 y 18 eventos para el Océano Pacífico, de los cuales, al menos 7 u 8 serán tormentas tropicales y de 8 a 10 alcanzarán vientos de un huracán y la mitad de ellos estarán por arriba de la categoría 2 de la escala Saffir-Simpson.
Anualmente, la temporada de ciclones tropicales inicia el 15 de mayo en el Pacífico y en el Atlántico el 1 de junio, en ambos casos, el final de la temporada es el 30 de noviembre.
Ante el riesgo de deslaves, aumento en los caudales de ríos y arroyos e inundaciones en zonas bajas, las autoridades exhortan a la población de los estados mencionados y a la navegación marítima, atender los avisos del SMN de la Conagua y las indicaciones de Protección Civil, así como mantenerse informados en medios de comunicación.
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