Mario Delgado, presidente de la Junta de Coordinación Política en la Cámara de Diputados (Jucopo), coincidió en eliminar 44 fideicomisos federales y destinar esos recursos al sector Salud.
Este pronunciamiento está justificado en la declaración del presidente Andrés Manuel López Obrador del lunes 10 de agosto, cuando refirió que enviará una iniciativa para eliminar algunos fideicomisos.
A pesar del descontento manifestado por algunos beneficiarios de los fideicomisos, el coordinador del Grupo Parlamentario de Movimiento Regeneración Nacional (Morena) dijo que esto va a ser una realidad.
“Tenemos una iniciativa para extinguir 44 fideicomisos, no ha sido dictaminada ni votada, viene una nueva iniciativa con más fideicomisos, mismos que vamos a analizar, a dictaminar y a votar a principios de septiembre, porque en septiembre también arranca la discusión del paquete económico, el próximo día 6”, explicó el egresado del ITAM.
El diputado federal no descartó el establecer una discusión amplia sobre el tema; sin embargo, el contexto actual, donde la presencia del nuevo coronavirus y las consecuencias económicas que trajo consigo son dos factores que no se pueden dejar pasar.
“Sigue la discusión sobre esos 44, la gran mayoría de esos fideicomisos van a desaparecer, por eso ya hicimos el parlamento abierto, por eso ya hicimos la revisión, y hasta el momento la conclusión es que unos cuantos sobrevivirían, pero la gran mayoría tendría que desaparecer”, abundó.
Ante la extrañeza que pueda representar este tema en los lectores, se debe de definir qué es un Fideicomiso Público y porqué se plantea el tomar recursos de ahí.
El gobierno, a través de sus dependencias, utiliza los fideicomisos para transmitir la titularidad de algunos recursos del dominio público a privados para realizar un fin determinado de interés público.
Con la expedición de la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, en 2006, el criterio legislador de este rubro cambió y determinó que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) sólo otorgará fideicomisos de la Administración Pública Centralizada; es decir, se le abre la puerta a los poderes judicial y legislativo para constituir fideicomisos públicos con recursos provenientes de sus presupuestos autorizados. Por esta razón, López Obrador necesita de la aprobación parlamentaria, pues estas facultades ya no están centralizadas en las secretarías federales que obedecen al poder ejecutivo.
No obstante, Mario Delgado, explicó que este tema no es el único que tienen pendiente, pues el inminente inicio de sesiones ordinarias bajo la nueva normalidad es un tema crucial, siquiera, para iniciar cualquier discusión parlamentaria.
“Estamos revisando distintas alternativas. Difícilmente lo podremos llevar a cabo en el salón de la Cámara de Diputados como se hace desde hace muchos años. Hay varias opciones, una que solamente la mitad de los legisladores asista, probablemente también pudiéramos asistir al Auditorio Nacional que hay un espacio más que suficiente para tener la separación adecuada”, explicó el legislador en un comunicado oficial.
Ante esta problemática, las cámaras legislativas enfrentan tanto capacidades técnicas como administrativas para tener la capacidad de cumplir sus funciones.
“Estamos ensayando distintas maneras de poder operar el salón y que tendrá que ver también con la operación de la Cámara de Diputados. Probablemente vamos a un esquema semipresencial donde haya una parte de legisladores en el Pleno y otra parte por la vía remota, por la vía virtual; legisladores sobre todo que tengan un mayor riesgo de viajar, o de contagiarse de Covid”, estimó Delgado Carrillo.
Finalmente, adelantó que existen temas pendientes y que son de carácter urgente para el Estado de derecho y serán con los que iniciarán a sesionar. El primero de ellos será el Paquete Económico 2021, mismo que se encarga de desarrollar la SHCP a cargo de Arturo Herrera; así como la eliminación del fuero presidencial.
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