Alejandro Rojas, candidato a la presidencia nacional de Movimiento Regeneración Nacional (Morena), solicitó la remoción de Alfonso Ramírez Cuéllar como dirigente interino del partido al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF)
Esto porque, de acuerdo con el senador sustituto de Ricardo Monreal, “se la han pasado violando los derechos políticos y partidistas de millones de lopezobradoristas durante los últimos dos años, burlándose de los protagonistas del cambio verdadero y pisoteando el Estatuto de Morena, las leyes y la Constitución”.
El problema que representa la sucesión en la dirigencia del partido que puso a Andrés Manuel López Obrador en la silla presidencial es de carácter ideológico a primera vista, pues los métodos para establecer al nuevo líder desataron discusiones internas en donde diversos militantes y simpatizantes se han confrontado en distintas plataformas mediáticas y digitales; sin embargo, con una revisión más profunda, se puede ver un conflicto de facciones que buscan consenso para establecer los comicios del 2021.
Respecto a la justificación para la dimisión de Ramírez Cuéllar, Rojas Díaz Durán aseguró que el actual líder planea poner un “Berthazo” a Morena, esto, en referencia a Bertha Luján, quien hace unos meses convocó a un congreso emergente de militantes que terminó con la designación del entonces diputado federal Alfonso Ramírez.
Actualmente, Alejandro Rojas propone que para la elección del próximo presidente de partido se apliquen tres encuestas abiertas a 30 millones de ciudadanos mexicanos, pero los opositores a esta propuesta solicitan que se encueste a los militantes de morena.
Como argumento, los detractores de este método, ponen la presencia del nuevo coronavirus; sin embargo, el politólogo de la Universidad Iberoamericana asegura que eso es una excusa sin fundamento.
“Desde que se inventaron los pretexto, se acabaron los demócratas”, refiere. Y asegura que esta decisión va en contra de los estatutos de Morena, pues le abre las puertas al “dedazo” para elegir las dirigencias.
Iremos a tope y aprenderán a respetar las leyes, las instituciones, la sugerencia del Presidente López Obrador y, lo más importante, la voluntad democrática del pueblo de México. Les vamos a ganar con la Constitución en la mano
Por su parte, Mario Delgado coincidió, en este sentido, con Rojas y opinó que el método puede ser abierto, para que la dirigencia que emane de ese proceso tenga la capacidad de convocar a la unidad.
“La dirigencia de Morena tiene que renovarse en un proceso que sea abierto, con una metodología clara y sin manipulación. Es necesario que el dirigente que salga de ese proceso tenga toda la legitimidad para convocar a la unidad de toda la militancia para 2021”, escribió en su cuenta de Twitter el líder de la Junta de Coordinación Política (Jucopo).
Este conflicto ha venido escalando desde ya hace algunos meses, en donde voces como la de John Ackerman, Ricardo Monreal, Porfirio Muñoz Ledo, Citlalli Hernández y otros más se han confrontado abiertamente en redes sociales.
De entre los mensajes que conmina a la unión entre morenistas destaca el de Monreal Ávila, líder del partido en el Senado de la República, quien ha evitado confrontaciones entre similares.
“Nunca me voy a confrontar con quienes simpatizamos en la construcción de este movimiento. Si no lo hago con la oposición, menos lo haría con mis compañeros que están en el movimiento luchando”, aseguró en un tuit cuando fue increpado por Ackerman, miembro del Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de la UNAM, por su modo de hacer política.
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