El mes de julio continúa regalando eventos astronómicos insuperables. Después de que el cometa Neowise cautivara a miles de mexicanos, y Saturno se acercara lo suficiente a la Tierra para poder contemplar a través de un telescopio sus anillos, el mes cierra con uno de los fenómenos celestes favoritos: la lluvia de las Delta Acuáridas.
A diferencia de lo que se podría pensar, las Delta Acuáridas no son estrellas, sino meteoros que se formaron a partir de los restos de un cometa, según sospecha la NASA, del 96P Machholz, que se cruza con nuestro planeta en su órbita alrededor del sol.
“Se sospecha que las piezas de desechos espaciales que interactúan con nuestra atmósfera para crear los Delta Aquariids se originan en el cometa 96P/Machholz. Este cometa completa una órbita alrededor del sol aproximadamente una vez cada cinco años”, indica la NASA en su sitio web.
Este martes 28 de julio se dio una de las mejores oportunidades para observar esta lluvia en el firmamento. Pero si te lo perdiste, aún habrá dos ocasiones más, ya que el miércoles 29 y el jueves 30, los meteoritos se verán en su máximo esplendor. Y según la agencia espacial estadounidense, por su posición geográfica, México es uno de los países afortunados que podrá ser testigo del espectáculo.
“Las Delta Acuáridas se ven mejor en el hemisferio sur y en las latitudes meridionales del hemisferio norte”, explica.
Para que no dejes pasar el evento, te contamos paso a paso cómo verlo desde México.
Primer paso: el mejor momento
Según los astrónomos de la NASA, la observación de estos meteoros es complicada, porque se trata de cuerpos débiles, y el brillo de la luna puede impedir avistarlos.
Aunque aproximadamente caen 20 meteoritos por hora, a finales de julio, la tasa aumenta, por lo que aumentan las oportunidades de captarlos en la oscuridad de la bóveda celeste. De acuerdo a los astrónomos, las mejores fechas para verlos desde México son el 28, 29, y 30 de julio, a las 23:00 horas. Localizarlas, sin embargo, puede ser un reto, y por ello es necesario seguir todas las recomendaciones.
Segundo paso: el lugar
A la hora de elegir un lugar, es importante evitar la contaminación lumínica de las grandes ciudades. Además, es necesario que el cielo esté despejado.
“Encuentre un área lejos de la ciudad o las luces de la calle. Venga preparado con un saco de dormir, una manta o una silla de jardín. Acuéstate y mira hacia arriba, observando la mayor cantidad de cielo posible”.
Tercer paso: localizarlo en el cielo
Para ver caer la lluvia desde México, hay que dirigir la mirada hacia el este. Si no sabes cuál es la dirección, la mayoría de celulares cuentan con una app de brújula para orientarte.
A continuación, debes buscar la constelación Acuario. Según la NASA, al observar el firmamento, esa parece ser la zona desde la que caen los meteoros.
“Su radiante, el punto en el cielo del que parecen provenir las Delta Acuáridas, es la constelación de Acuario. La tercera estrella más brillante dentro de la constelación se llama Delta. Esta estrella y la constelación le dan nombre a la lluvia”, explica la agencia espacial estadounidense.
“Dirigir la mirada hacia el medio camino entre el horizonte y el cénit, a unos 45 grados de la constelación de Acuario, mejorará tus posibilidades de ver los meteoros”, agregó.
Si no sabes cómo guiarte en el cielo, recuerda que existen apps como SkySafari para Android o SkyView, para IOS, que te ayudan a localizar estrellas en el firmamento.
Cuarto paso: instrumentos de observación
Las Delta Acuáridas pasarán a una velocidad de 41 kilómetros por segundo. Por ese motivo, los astrónomos recomiendan no apartar la vista de la bóveda celeste.
Para ser testigo del evento astronómico no es necesario contar con equipos profesionales o instrumentos de observación. Solo se necesita pequeñas dosis de paciencia.
“En menos de 30 minutos en la oscuridad, tus ojos se adaptarán y comenzarás a ver meteoros. Tenga paciencia: el espectáculo durará hasta el amanecer por lo que tiene mucho tiempo para echar un vistazo”, informa la NASA.
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