Decenas de guitarras, relucientes, como salidas de la película “Coco” de Pixar, colgaban en la parte trasera de una camioneta de redilas, estacionada en avenida Antonio Caso, casi enfrente del sindicato de trabajadores de la Ciudad de México.
Las vimos varias veces desde el coche, cuando regresábamos de algunas compras, en las pocas salidas que hemos tenido mi esposa y yo desde la segunda quincena de marzo. Pensamos de inmediato en Daniel, nuestro hijo de menos de dos años, que ama la música y aún más las guitarras.
Un día, sin más, bajamos los tres con cubrebocas a ese puesto de guitarras instalado en mitad del tránsito. Conocimos a don Genaro, artista artesano de Paracho, Michoacán, con su gran mostacho y su sonrisa de lado a lado. Nos hizo sentir como si lo conociéramos de toda la vida: con una amabilidad, calidez y afecto que no nacían de ningún entrenamiento empresarial, sino de sus raíces, de su educación y desde el fondo de su corazón.
Daniel eligió una linda guitarra color paja y ámbar. Nos íbamos felices por la compra, cuando mi tocayo y paisano (toda mi familia es de Michoacán) nos alcanzó y le regaló a mi hijo un pequeño violín de madera de juguete.
Toda la tarde estuvimos felices por el gran acontecimiento que nos cambió el día: dar un gran regalo a nuestro hijo y conocer a don Genaro, quien en unos minutos nos devolvió la fe en la humanidad.
Ese día don Genaro me dio dos lecciones básicas para cualquier emprendedor o cualquiera que tenga un negocio. La primera es la perseverancia, pues él está todo el día con su camioneta intentando vender alguna guitarra y no importa si pasan días y nadie le compra. La segunda es que la mejor innovación en este mundo en medio del estrés provocado por el COVID-19, cuando estamos aislados y añoramos el contacto, es justo sacar lo mejor que tenemos como humanos: un trato cálido y amable, enriquecido con una sonrisa sincera.
Más de cuatro meses después de iniciado el Gran Encierro, la pandemia no cede y los negocios ven cada vez más difícil evitar la quiebra. ¿Hay alguna salida? Como nos enseña don Genaro con su negocio de guitarras de Paracho, yo pienso que sí hay caminos para evitar quebrar y darle la vuelta a la crisis.
Misión: sobrevivir
Si tienes un negocio o eres emprendedor, es momento de tomar decisiones que jamás pensaste tomar. El objetivo es la supervivencia de tu negocio y de tu familia. No puedes quedarte de brazos cruzados: si el mundo cambia, tú debes cambiar también.
Te preguntarás: ¿Y cómo le hago? ¿Por dónde empiezo? Te recomiendo investigar, leer y ver qué están haciendo otras empresas en México o en cualquier parte del mundo. De ahí puedes tomar ideas y aplicarlas a tu empresa. No importa que no funcionen a la primera: es momento de probar, fracasar rápido y aprender cómo hacerlo mejor.
Aquí te dejo 10 caminos que diferentes tipos y tamaños de empresas están tomando para sobrevivir y darle la vuelta a esta crisis a la que aún no se le ve fin:
1. Es hora de que vayas a los canales digitales. Esta es la opción más obvia de todas: si no estás en internet en un momento donde la gente teme el contacto, es muy seguro que tu negocio no resista. Mira lo que hizo el chef Lalo García, de Máximo Bistrot, cuanto tuvo que cerrar su restaurante: empezó a cocinar en vivo por Instagram el menú de cada día, que ofrece para llevar a sus clientes, a un precio más accesible. ¿Qué logró? Que todos los días se agote su comida.
2. Cambia de forma radical el giro de tu negocio. Si en la crisis actual, tu producto o servicio dejó de venderse o de ser tan necesario, pero tienes una infraestructura disponible, es tiempo de cambiar lo que fabricas… Aunque sea solo provisionalmente. Un ejemplo: las fábricas de la industria automotriz, como GM y Ford, modificaron algunas de sus líneas de producción inactivas para fabricar dispositivos médicos, como ventiladores.
3. Ofrece tu equipo a otra empresa. Sé que suena muy loco, pero es posible. Si tu negocio está varado y no tienes modo de darle empleo a tu equipo, fíjate que hay industrias que hoy tienen más ventas que nunca y les faltan manos. En Estados Unidos, Amazon anunció que estaba buscando emplear 100,000 trabajadores adicionales para satisfacer la mayor demanda de compradores en línea, confinados en sus casas. Se asoció con una compañía de viajes, Lyft (como Uber), cuyos servicios casi dejaron de usarse. Así, ambas ganaron: Amazon pudo cubrir la demanda y Lyft pudo darles algunos ingresos a sus conductores.
4. Haz trueque de productos y servicios. Si te urge adaptar tu empresa a los nuevos tiempos, pero no tienes dinero, hay otras opciones. Por ejemplo, una empresa de consultoría en recursos humanos, que no tenía sus procesos completamente digitalizados, obtuvo un desarrollo de software a su medida y, en lugar de pagar con dinero, pagó ofreciendo sus servicios de consultoría para mejorar el desarrollo del equipo humano de la empresa de software.
5. Alíate con tus competidores. Hoy tu competencia puede ser tú única tabla de salvación. No olvides que muchos negocios están pasándola igual o peor que tú. Te doy una idea: una tiendita de abarrotes se alía con las otras 9 o 10 tienditas de abarrotes del barrio para, en lugar de competir, sumar esfuerzos y lograr: mejores precios al comprar por mayoreo, posibilidad de abrir una página web y dar servicio a domicilio, además de arrancar campañas en redes sociales. Se suman recursos, conocimientos y experiencias diversas.
6. Diversifica o readapta tu oferta. Tal vez tu producto o servicio aún es relevante para el mercado, pero pese a todo sí están cayendo tus ventas. Entonces, es momento de readaptar o diversificar. Homely, una empresa que da servicio de limpieza a hogares y empresas, ahora, además, ofrece servicios de desinfección con productos de sanitización avalados por la Cofepris.
7. Haz equipo con empresas grandes y usa tecnología que ya existe. Roomie Bot, una firma de ingenieros mexicanos, desarrolló (con apoyo de tecnologías de Intel y Amazon) un robot humanoide que es capaz de diagnosticar posibles casos de COVID-19. Está equipado con un termómetro, un oxímetro, tecnologías de cómputo visual y machine learning.
8. Investiga mucho y desarrolla innovación rápida. Orbia, una empresa mexicana, unió fuerzas con NanoScent Labs, para fabricar un kit de detección de coronavirus basado en el aroma específico que emiten los pacientes hospitalizados con el virus. Este kit se podría utilizar para realizar pruebas rápidas a gran escala en lugares públicos.
9. No dejes de escuchar y consentir a tu cliente, aunque ahora no pueda comprarte. En Río de janeiro, Brasil, la empresa RioFilme está proyectando todas las noches diferentes películas en las paredes de edificios para que la gente confinada en sus casas pueda verlas desde sus balcones. Aunque es un servicio gratuito, cuando los cines reabran las personas amarán la marca RioFilme y la preferirán por sobre la competencia.
10. Cuenta la historia correcta. Hoy, más que nunca, en un contexto de crisis, escasez y ahorro, las personas comprarán a personas y no a marcas. Si tú sabes enamorar con tu historia de fracaso-éxito y superación a todos tus stakeholders, la gente amará ser parte de esa historia siendo tu cliente, tu proveedor, tu inversionista o simplemente tu fan que ayudará a promover lo que haces y a que lleguen más ventas.
*Periodista de negocios, consultor en comunicación integral y speaker. LinkedIn Top Voices 2019
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