Este 2020 dio un giro de 360° a nuestras vidas, de un día para otro, tuvimos que asumir un sinfín de cambios en nuestras actividades diarias; por ejemplo, la mayoría de las personas empezaron a trabajar desde casa, lo que tuvo muchas ventajas, entre ellas, convivir más con la familia, y lo más importante, poder disfrutar de más tiempo con sus mascotas.
Los humanos y los animales de compañía son seres sociales, por lo que era de esperarse que, durante esta cuarentena, las personas que tienen perros o gatos hayan forjado un vínculo más fuerte del que ya tenían.
Este tipo de vínculos, por lo general, tiene muchos beneficios en el bienestar tanto del humano como del animal; sin embargo, hay que tener cuidado con la intensidad de este vínculo, ya que se pueden llegar a presentar problemas de hiperapego, que podría detonar un problema de ansiedad por separación en el momento que debamos regresar a nuestras actividades “normales”.
Algunos signos de estrés o sufrimiento, resultado de lo anterior, son los siguientes:
- Vocalizaciones excesivas
- Micción o defecación en lugares no habituales
- Destrucciones en el hogar
- Nerviosismo, inquietud, deambulación
- Conductas repetitivas (dermatitis por lamido acral)
- Hipersalivación
- Jadeo
- Vómitos y diarreas
- Cambios en su apetito
Es importante aclarar que estas conductas no son vengativas; por el contrario, son un indicativo de que tu mascota está sufriendo.
Entonces, con el fin de evitar este tipo de problemas tenemos que tomar en cuenta que el bienestar de tu mascota depende principalmente de varios aspectos como el ejercicio físico, el ejercicio mental, el contacto, la interacción social y la exploración del entorno, por lo que se recomienda lo siguiente:
1. Mantener, lo más que se pueda, las rutinas que se ajusten a los horarios que tendremos disponibles una vez que regresemos a la nueva nuestras actividades en “la nueva normalidad”; es decir, si su horario de paseo será a las seis de la mañana, procura respetarlo o realizar el paseo lo más cercano al que tendrá después de la cuarentena. La rutina también incluye los horarios de comida, el tiempo de juego y de ejercicio.
2. Propiciar momentos de autonomía. Es importante que no todo el día estemos junto a nuestras mascotas, ya que el cambio podría ser muy difícil de asimilar. Ellos también necesitan su espacio, por lo que conviene asignar una zona en la casa donde nuestras mascotas puedan permanecer tranquilas en los momentos en que normalmente estemos ocupados; en este lugar debemos colocar juguetes cognitivos y de olfato para así estimular su mente. Un ejemplo podría ser esconder premios por toda la zona, esto ayuda a que tu mascota se entretenga por un rato y desarrolle su sentido del olfato. Otro ejemplo sería utilizar el rollo de cartón, como el de las servitoallas, hacer pequeños agujeros y meter un poco de su alimento, una vez hecho esto, tapamos los extremos, y se lo damos a nuestra mascota para que juegue, ya que al moverlo comenzarán a salir los premios.
3. Organizar dinámicas de salidas. Es muy importante empezar a dejar solas a nuestras mascotas y paulatinamente ir aumentando el tiempo de nuestra ausencia. Para estas salidas utilizaremos la zona que creamos para disfrutar sus momentos de autonomía, la cual debe tener juguetes dispensadores de comida, juegos de olfato, juguetes convencionales, carnazas, zona de descanso y agua para que a tu compañero peludo no le falte nada.
Por otro lado, si queremos evitar que nuestros peludos destruyan cosas, podemos proporcionarles diferentes juguetes y accesorios con que distraerse, como peluches, pelotas, trenzas, carnazas, y muchos más. Además, es recomendable utilizar difusores de feromonas o aromatizadores para humanos con aromaterapia y música suave, que nos ayudaran a mantener el ambiente aún más relajado.
Por último, si percibes que a tu mascota le está costando mucho adaptarse a la nueva normalidad, no dudes consultar a un Etólogo.
*Etóloga y Médico Veterinario
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